AdQualis, consultora integral en la gestión de personas y talento y pionera en la búsqueda de ejecutivos en España, presenta las iniciativas más habituales para mejorar el bienestar de los empleados en el marco del BlueMonday.
El Blue Monday, también conocido como el día más triste del año, tiene lugar el 16 de enero y hace referencia a un conjunto de variables que influyen en el carácter y en el estado anímico de las personas. Este término se originó en 2005, año en el que el profesor de la universidad de Cardiff desarrolló una fórmula matemática que recogía una serie de parámetros como el clima, el tiempo transcurrido desde las vacaciones de Navidad, las deudas adquiridas tras estas fechas y la cuesta de enero, así como la motivación y el tiempo transcurrido desde el último intento de abandonar algún mal hábito. El resultado de la fórmula decretó que el tercer lunes del mes de enero era el día en el que las personas presentaban el punto de mayor tristeza del año.
En el marco de esta efeméride, AdQualis presenta las políticas de bienestar más comunes en las empresas y señala la importancia de apostar por impulsar el wellbeing para lograr el buen rendimiento de los equipos y la atracción y retención del talento.
Mejorar la salud física y emocional de los profesionales cada vez resulta más primordial para impulsar la motivación, el compromiso y la productividad de las plantillas. Según datos de la OMS, el 45% de los empleados reconoce sufrir estrés laboral. Además, el último informe de ADP Research Institute refleja que más de la mitad de la fuerza laboral a nivel mundial siente que su rendimiento se ve afectado debido a su estado de salud mental.
En este sentido, son muchas las empresas que han optado por implementar nuevas formas para apoyar la salud mental de su plantilla. El estrés frecuente que ya padecían muchos empleados aumentó de forma significativa durante la pandemia, momento desde el cual las compañías han integrado iniciativas de mejora de la salud mental como servicios de terapia psicológica para combatir los síntomas de depresión, desmotivación y el sonado “burnout” en el trabajo. Otras iniciativas en esta línea son mantener una comunicación más directa y activa con los trabajadores y ofrecer descansos para el control del estrés como realizar actividades de relajación y meditación como clases de yoga y mindfulness, tener acceso a una sala “zen” o contar con descansos adicionales durante el día.
Cuidar la alimentación y el estado físico de los empleados es otra de las iniciativas desarrolladas por las empresas de cara a tener plantillas más felices y saludables. En este aspecto, muchas organizaciones han implementado servicios de nutrición especializada y oferta de snacks saludables en sus cantinas. En línea con la mejora de la salud, está científicamente probado que muchos trabajos son sedentarios, por lo que muchos trabajadores pasan la mayoría de su jornada laboral sentados en sus oficinas. Para remediar esto, muchas compañías ofrecen servicios gratuitos o grandes descuentos para que sus empleados puedan acudir a gimnasios o a centros deportivos con regularidad.
Otra iniciativa importante para impulsar el entusiasmo y la motivación de los empleados, que a su vez haga mejorar la gestión y la retención del talento, son las políticas de conciliación laboral, es decir, la libertad de teletrabajo y la flexibilidad horaria de entrada y salida. Un ejemplo de esto son las empresas quedan la posibilidad a los empleados de teletrabajar los días no lectivos para mejorar la conciliación en el hogar, o empresas que establecen relaciones de confianza con sus plantillas para que dispongan de la libertad para alcanzar sus metas extralaborales y sentirse realizados tanto dentro como fuera de la empresa, algo primordial en las generaciones más jóvenes.
Finalmente, fomentar la formación de los empleados es otra de las actividades diseñadas por los departamentos de recursos humanos para mejorar el desarrollo de los empleados. En este sentido, la asignación de tareas es fundamental para mantener a los empleados motivados. No se trata sólo de poner objetivos disponibles para todos, cada profesional tiene unos skills, sumados a su experiencia, que le permiten desarrollar con más facilidad unas actividades que otras. Además, es importante que los empleados se sientan valorados y reconocidos y para ello deben desempeñar aquello que mejor se les da hacer, pero también es importante para mantener su motivación que se les propongan nuevos retos y se les instruya en actividades diferentes.