Las personas son el principal activo de las empresas y, después de la pandemia, se hizo evidente la necesidad de cuidar la salud mental, combatir el burnout (agotamiento laboral) y el estrés dentro de las empresas tecnológicas, con el fin de incentivar el rendimiento y la productividad. Por esta razón, María Barrios, Chief People Officer de Rocket Lab, explica porqué es necesario incluir un programa de salud y bienestar que ayude a potenciar los objetivos estratégicos y comerciales de las empresas.
Cuatro de cada diez empleados en el área tecnológica experimentan cansancio emocional, y uno de cada cinco desea abandonar su empresa a los seis meses de haber iniciado su trabajo, debido a la falta de bienestar mental, según datos de la plataforma especializada en bienestar laboral, Yerb.
Las consecuencias van más allá para la economía global, pues cada año se pierde al menos un millón de dólares como consecuencia de la baja productividad. Ello es resultado de los efectos del estrés, la depresión y la ansiedad, de acuerdo al Banco Mundial.
Según el estudio Emotional Intelligence del instituto de Investigación de Capgemini, se confirma que una plantilla con una IE (Inteligencia Emocional) alta puede aumentar la productividad en un 20%.
Por tanto, una inteligencia emocional alta es un punto a favor en el perfil profesional como indica la plataforma LinkedIn en su web, donde destaca las habilidades emocionales como una de las cinco tendencias en soft skills para el 2022. En el estudio mencionado anteriormente, se desvela como 3 de cada 4 CEOs creen que contar con una plantilla con una inteligencia emocional alta favorece los intereses comerciales.
“Una de las mejores estrategias para mejorar el rendimiento y retención de talento en una empresa de tecnología es apostar por nuevos programas y puestos de trabajo dedicados al bienestar mental y laboral, pues esto significará para la empresa mayor creatividad, mejor dinámica entre los equipos de trabajo, equilibrio entre la vida personal y profesional, mejores tasas de retención y mayor productividad”, señaló Juan Echavarria Coll, CEO y Cofundador de Rocket Lab.
Por tal motivo, Rocket Lab nombró a Maru Barrios como su Chief People Officer, actual operadora estratégica para mejorar el bienestar, impulsar la inteligencia emocional y liderazgo de los empleados y optimizar entre los colaboradores la atención de prioridades, desafíos y objetivos de la empresa. Proceso similar a los casos de éxito que han tenido grandes transnacionales, como Starbucks que ofrece acceso a 20 sesiones anuales de salud mental gratuitas a sus trabajadores norteamericanos y familiares. Asimismo, la aseguradora global AXA lanzó AXA BetterMe, una plataforma para el bienestar físico, mental y manejo de enfermedades crónicas para apoyar a sus colaboradores.
Quién es Maru…
Maru es la responsable de ayudar a que los colaboradores de Rocket desarrollen su máximo potencial profesional y personal mediante la construcción de una cultura de seguridad psicológica, de programas de entrenamiento y cambio organizacional. Ella se convirtió en la mujer detrás del puesto ahora crucial en Rocket Lab.
Nacida en Valencia, Venezuela, a los 12 años se mudo a la Ciudad de México y desde hace varios años vive en Houston, Estados Unidos. Cuenta con una Licenciatura en Comunicación en el Tec de Monterrey, una maestría en Desarrollo Humano por la Universidad Iberoamericana y un Doctorado en Liderazgo y Cambio Organizacional en University of Southern California.
Maru decidió dedicarse al desarrollo humano para ayudar a las empresas a mejorar su productividad y elevar la motivación de los empleados. Por lo que se convirtió en la CEO de Beehappy, empresa de consultoría y de entrenamientos de inteligencia emocional para diferentes compañías como Lenovo, AT&T, Telefónica Movistar, Seguros Monterrey, Merck, EY, Herbalife, Tec de Monterrey, Fridays, Scotiabank y Banca Mifel, por mencionar algunos.
Actualmente en Rocket Lab, Maru cumple con cinco roles fundamentales: el primero es ser socia estratégica para la dirección general y de cada área de la empresa para garantizar que las decisiones tengan un enfoque centrado en las personas. Segundo, se encarga del diseño, implementación y medición de planes de desarrollo profesional y personal basado tanto en los objetivos de la persona como en los objetivos del negocio. En tercer lugar, pone en marcha y analiza las estrategias de reclutamiento y selección para encontrar el mejor talento disponible en la industria; en cuarto lugar es la responsable de la creación y gestión de una cultura organizacional colaborativa y su quinto rol, es dar acompañamiento y contención emocional a todos los colaboradores.
Junto con las actividades y talleres de coaching 1-1, se apoya en la tecnología, aplicativos bots e inteligencia artificial para facilitar y medir los programas internos, y al mismo tiempo monitorear la salud emocional de la empresa, para darles a todos los colaboradores herramientas que potencien sus habilidades profesionales y personales.
Para finales de 2022 se espera que Rocket Lab alcance 825 horas de coaching, 840 horas de entrenamiento de inteligencia emocional o desarrollo humano y 768 horas de alineación estratégica dentro de los procesos de gestión.
Con la puesta en marcha de las estrategias y acciones de la Chief People Officer, Rocket Lab se coloca como un referente de la industria digital. Los resultados son prometedores: 92% de los empleados se sienten totalmente felices de estar en la empresa, 90% considera haber conseguido un crecimiento personal, 90% percibe un acompañamiento y respaldo de su líder de equipo y se autonombran como embajadores de compañía.
“La importancia de promover puestos encaminados a impulsar la inteligencia emocional radica en que en un futuro las personas, quienes ocuparán altos puestos corporativos, no serán aquellos con grandes competencias técnicas, sino quienes den efectivo acompañamiento a las tareas, control de las emociones y una buena comunicación. Todas estás cualidades serán irremplazables,” asegura Maru Barrios, Chief People Officer de Rocket Lab.
Los comentarios están cerrados.