¿Te sientes sobrepasado con la simple idea de lo que se te viene encima? La anticipación de acontecimientos estresantes es prácticamente igual de nociva que vivir el evento en sí mismo, de hecho, preludiar estas situaciones nos predispone a tener pensamientos negativos y a adelantar las cosas con una actitud pesimista.
Es francamente complicado remontar o cambiar el escenario cuando tu cuerpo y tu mente se preparan para el desastre antes de tiempo. A este patrón se le conoce como “Meta Estrés”, o estrés anticipado al propio estrés.
Te daré algunas pautas para llevar la delantera y mitigar sus efectos:
Alinéate con tus bioritmos
Existe una relación directa entre nuestro reloj interno y los niveles de estrés que podemos sufrir. Cuando vamos en contra de nuestros bioritmos naturales, cualquier contratiempo puede causarnos un cortocircuito y desatar sensaciones de ansiedad y malestar.
Más allá de los horarios preestablecidos de trabajo, es importante comprender nuestro propio orden interno para organizarnos mejor y aprender a gestionar el estrés en una escala más amplia. Conocer las horas a las que eres más productivo te hará ganar tiempo, economizar recursos y energía, además de crear más espacio para el descanso, ya sea dormir, hacer deporte o tener más ocio. Cambiar esta ecuación ayudará a equilibrar los niveles de estrés en el día a día.
Establece tus fronteras
La hiperconectividad a la que estamos sometidos nos expone a un mayor número de imprevistos. Saber que en cualquier momento podemos recibir un email bomba, un mensaje de alarmante o una llamada, nos sitúa permanentemente al borde del precipicio, incluso cuando estamos fuera del trabajo, ya que esto puede suceder a cualquier hora del día.
Someter al sistema nervioso a esta tensión continua deriva en que nos sentimos abrumados sin razón aparente. Está demostrado que la simple expectativa de mirar el correo antes de ir a trabajar o chequear las redes sociales, produce altos niveles de estrés y genera comportamientos tóxicos como mirar los emails en cuando suena el despertador, o los mensajes de los chats sin haber salido de la cama.
Establecer los límites adecuados está en tus manos. Hazlo con tu horario de trabajo y trata de respetarlo, también con los dispositivos digitales de manera que la mañana o la tarde se conviertan en tiempo para ti y aquellos que conviven contigo.
Comunica y comparte
Con frecuencia, muchas situaciones estresantes se dan debido a malentendidos o errores de comunicación. Hablar de forma clara y directa compartiendo cómo te sientes con otras personas es una buena manera de obtener ayuda, consejo y alivio.
Si te sientes abrumado por la excesiva carga de trabajo, comunica esa inquietud a tus compañeros para crear una nueva estrategia, delegar o encontrar una solución práctica antes de que se haga inmanejable; en lugar de anticipar el desastre anticípate al remedio.
En la App de The Holistic Concept encontrarás programas dirigidos a la gestión del estrés y la comunicación, ejercicios prácticos que te ayudarán a sobrellevar esos momentos de presión y a calmar los pensamientos negativos previos.
1 comentario en «Meta Estrés, un paso por detrás de la ansiedad»
Totalmente acertado el artículo. Vivimos constantemente anticipando lo que va a pasar, preparándonos para todo lo negativo y muchas veces no llega a ocurrir nada de esto.
Recomiendo para aprender a vivir con menos estrés la meditación.
https://www.psicologoparati.com/mindfulness-y-meditacion/
Los comentarios están cerrados.