CCOO alerta de la posible crisis irreversible del sector naval en nuestro país, si finalmente la Comisión Europea obliga a devolver las desgravaciones fiscales que han facilitado la actividad de los astilleros durante los últimos años, a la vez que manifiesta su apoyo y solidaridad al conjunto de trabajadores y trabajadoras del sector naval cuya continuidad laboral puede verse afectada por estas medidas.
CCOO rechaza la posición anunciada por el Comisario Europeo responsable de la materia, Joaquín Almunia, en el sentido de que va a proponer a la Comisión Europea que el sector naval español devuelva 2.800 millones de euros de esas desgravaciones. El que esta decisión pueda suponer la desaparición de los 19 astilleros privados y los 87.000 empleos a ellos asociados, no parece que sea un elemento que se esté teniendo en cuenta por los responsables comunitarios. Estaríamos así ante otra muestra de medidas en contra de la ciudadanía, que sólo pueden reforzar la creciente desafección hacia las instituciones europeas.
Para CCOO, es necesario que el Gobierno español, con el ministro de Industria al frente, actúe con firmeza para hacer frente a esta iniciativa, defendiendo un sector naval cuya continuidad es vital para las comarcas donde se ubican sus instalaciones y exigiendo a la Comisión Europea el mismo trato que recibió Francia en 2005, cuando fue anulado un régimen fiscal similar, sin que esta anulación llevará aparejada la devolución de las desgravaciones.
CCOO considera necesario también abrir un proceso de consultas y negociación con los representantes del sector, empresarios y sindicatos, además de los gobiernos autonómicos afectados, para establecer un marco fiscal que devuelva la seguridad jurídica a esta actividad y garantice su continuidad. Nuestro país no puede permitirse de ninguna manera que siga desapareciendo nuestro tejido industrial y menos aún, si dicha desaparición obedece a una discutible interpretación de la normativa europea.
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