El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, y la secretaria federal de Bienestar Social del PSOE, Matilde Valentín, explicaron ayer a los consejeros y responsables regionales de bienestar social socialistas el capítulo de gasto social contenido en los Presupuestos Generales del Estado del 2007.
Según un comunicado difundido por el PSOE, Caldera ha citado como un objetivo del Gobierno la consecución de nuevos derechos, nuevas oportunidades, más prestaciones y mejores servicios para corregir las desigualdades en las que se encuentran determinados sectores de la población.
También ha señalado que, durante el Gobierno del PP, algunos colectivos como pensionistas, mayores, infancia o personas con discapacidad 'quedaron al margen del crecimiento económico', una circunstancia que, de acuerdo con la nota, 'ahora se está corrigiendo en los PGE', porque el Ejecutivo socialista 'tiene en cuenta las necesidades reales de la sociedad española'.
Valentín ha explicado que, por tercer año consecutivo, el gasto social supera el 50 por ciento en los PGE, lo que, a su juicio, demuestra la 'prioridad' del Gobierno por atender las 'principales preocupaciones de la ciudadanía'.
'Estamos ante unos presupuestos que, además de crear derechos para incrementar la seguridad de los ciudadanos a lo largo de su vida, son creadores de riqueza e invierten en el futuro apostando por incrementar el fondo de reserva de la Seguridad Social, que es la garantía de las pensiones de las próximas generaciones', según Valentín.
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