La Policía local de Sestao vive una auténtica estampida. 14 de los 15 agentes que lograron plaza en la plantilla el pasado abril se han buscado un hueco en otros cuerpos de seguridad. Siete ya se han marchado y otros tantos lo harán en breve. Seis a la guardia urbana de Barakaldo y otro a Basauri. Los sindicatos justifican su marcha por la 'pésima' organización del servicio y, sobre todo, por los bajos sueldos, 'los peores de toda la margen izquierda'. El alcalde, Alberto Lozano, ha anunciado medidas para frenar esta sangría. La principal pasa por un aumento anual de los sueldos de los policías de hasta 5.000 euros.
El sindicato Erne asegura que la 'alarmante' falta de personal repercute en el servicio. De una plantilla de 73 agentes, sólo hay 59 plazas cubiertas. Cuando se marche la última hornada quedarán 52 y entonces 'no se atenderá debidamente el municipio'.
Según desveló ayer la central en un comunicado, estas carencias ya se dejan notar. El pasado miércoles la comisaría estuvo cerrada 'por falta de personal' durante 20 minutos. 'Además, afecta a la seguridad personal de los agentes, que en muchas ocasiones se han tenido que enfrentar solos a situaciones de riesgo real', matizó. Los demás sindicatos explicaron que el jueves no hubo coches patrullas en la calle 'porque no se ha renovado el contrato de 'leasing'' con la empresa que los suministra. 'Los vehículos están en tal mal estado que pasan más tiempo en el taller que en la carretera', añadieron.
Los policías demandan una reestructuración interna. Entre las medidas que urgen adoptar está la cobertura de las plazas vacantes. También exigen cambios organizativos, nuevos vehículos y retribuciones 'dignas'. 'No hay planes de futuro y la Policía local se muere', sentencian. A su juicio, otro de los graves problemas es la concepción que tiene el político de lo que debe hacer la guardia urbana. Según denunciaron 'sólo nos quieren para que funcionen las escaleras mecánicas, que subamos y bajemos los pivotes en zonas peatonales o que hagamos de notificadores de deudas municipales'.
Las consecuencias de esta situación son una Policía 'totalmente desmotivada'. 'El Ayuntamiento no forma a los agentes, que se tienen que buscar los cursos por su cuenta', recriminaron. El mandatario local mostró su confianza en que la valoración de puestos de trabajo remitida a los sindicatos calme los ánimos. Este documento contempla subidas de hasta 5.000 euros anuales para los agentes. Además, desveló que ya se han elaborado las bases de una oferta pública de empleo. El objetivo es aumentar la plantilla hasta 81 policías con 30 incorporaciones. Como pasará más de un año hasta que estos profesionales patrullen las calles, 'estudiamos una solución temporal para cubrir este período de transición'.
Lozano reconoció carencias en el cuerpo, pero también denunció que el absentismo llega hasta el 30 por ciento. Y criticó la falta de implicación de algunos números. Según reveló, dos grupos de 16 agentes efectuaron más del 80 por ciento de las 64 detenciones de toda la guardia urbana en 2006 y pusieron el 57 por ciento de las 4.747 multas tramitadas.
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