Los funcionarios del Servicio de Empleo Público de la Junta de Castilla y León -Ecyl- denuncian trato de favor por parte del consejero de Presidencia, Alfonso Fernández Mañueco, hacia un nutrido grupo de trabajadores en régimen de personal laboral que a través de un decreto pasarán a ser empleados públicos, sin que hayan pasado las pruebas preceptivas que garantizan la igualdad de todas las personas para acceder a a este cuerpo, según aseguran los afectados, quienes califican esta situación como partidista.
Los funcionarios de esta entidad ya han iniciado una campaña de recogida de firmas, secundada por el 99% de sus compañeros, que han entregado en el registro de la Institución autonómica. En este sentido, aseguran que van a llegar hasta el final para que no se cometa esta «injusticia». La medida impulsada por Fernández Mañueco favorece a más de cien trabajadores que pasarán a formar parte de la categoría A, B o C y que permanecerán en su puesto laboral con los derechos de los demás trabajadores dependientes de la Administración autonómica.
Desde el Ecyl aducen que esta situación es una «medida política, porque lo que quieren es dejar a su personal bien colocado» y aseguran, además, que se están cargando la promoción interna. Actualmente el decreto se encuentra en periodo de alegaciones y está a la espera de su aprobación, aunque los perjudicados intentarán paralizar por todos los medios este reglamento y conseguir así que se les reconozcan sus méritos.
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