El Ministerio del Interior y Cruz Roja Española suscribieron ayer un nuevo convenio de colaboración, que permitirá, entre otras cosas, que voluntarios de la organización humanitaria entren en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs) para informar y asistir a los inmigrantes irregulares.
Así lo anunciaron el ministro Alfredo Pérez Rubalcaba y el presidente de Cruz Roja Española, Juan Manuel Suárez del Toro, tras la firma del convenio, que además incluye la ayuda de voluntarios para asistir a solicitantes de asilo en el aeropuerto de Barajas (Madrid), atender a reclusos en situaciones de extrema pobreza y actividades divulgativas en materia de seguridad vial.
El titular de Interior resaltó la importancia de que los voluntarios puedan entrar en los CIEs, para dar a los inmigrantes ‘una información neutral’ sobre las pautas del derecho internacional y nacional, por las que se rige la actuación de la Administración y la Policía.
El acuerdo también prevé la colaboración específica de Cruz Roja Española con la Dirección General de Tráfico (DGT), para actividades formativas, educativas o divulgativas que ayuden a reducir la siniestralidad en las carreteras.
Para la puesta en marcha de estas nuevas tareas, el Ministerio del Interior destinará a Cruz Roja Española en 2007 un total de 577.700 euros, un 15 por ciento mas que lo aportado el año anterior.
Antes de la firma del acuerdo, unos 150 voluntarios mostraron al ministro los equipamientos de las Unidades de Respuesta Inmediata en Emergencias, desplegados por Cruz Roja en su sede central de Madrid.
Estos equipos, que cuentan con especialistas en atención psicológica, sanitaria, rastreo y rescate, intervienen de manera rápida y efectiva en contextos de emergencias, como por ejemplo hicieron en los atentados del 11-M y más recientemente en las inundaciones de Castilla-La Mancha.
Asimismo, Pérez Rubalcaba hizo entrega de las acreditaciones a los miembros de estas unidades, en reconocimiento a su gran labor social.
El ministro manifestó ante los voluntarios su creencia profunda en el voluntariado, ya que -indicó- ‘una sociedad fuerte es aquella con un voluntariado fuerte’, que llega muchas veces donde no llega el Estado con mas agilidad y flexibilidad.
Reconoció que ‘los sucesos que vive el ministro del Interior no suelen ser muy agradables y los agradables tienen también una parte amarga’, por lo que agradeció especialmente poder estar en un acto ‘rotundamente agradable’.
Destacó que Cruz Roja ‘es la parte buena de mucho acontecimiento malo’, que ha sabido adaptarse con eficacia a los nuevos tiempos y situaciones, como la inmigración ilegal.
Por último, transmitió a los voluntarios un mensaje en tres palabras: ‘afecto, apoyo y agradecimiento’.
Por su parte, el presidente de Cruz Roja Española, Juan Manuel Suárez del Toro, dijo sentirse orgulloso del trabajo que los voluntarios de la organización hacen para ser útiles a la sociedad, y agradeció la sensibilidad del Gobierno ‘para que todo esto sea posible’.
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