La responsable del área dentro de UGT, Carmen Andrés, se muestra inamovible ante la postura defendida por su sindicato en los últimos años; critica con dureza la gestión institucional que, a lo largo de dos legislaturas, han realizado el Gobierno y la Junta, desde donde se ponen «trabas» a los licenciados para «dificultar» su inserción en el mercado laboral. «El problema no es de ahora, viene del 2000, y nosotros lo hemos denunciado desde esa fecha», enfatiza la portavoz, no sin antes recordar la necesidad de incrementar «urgentemente» la plantilla sanitaria de León en seiscientos trabajadores, «de los que doscientos tendrían que ser médicos -de primaria y especializada».
«La mayoría de los doctores se van fuera porque en otras comunidades autónomas tienen mejores condiciones de empleo». «Así de sencillo», Carmen Andrés, denuncia la «precariedad» a la que está sometido el personal sanitario de la provincia, «con contratos basura de lunes a viernes, antes eran sólo de fin de semana, y con unos sueldos bajos y con malas condiciones de descanso». Reclama, por lo tanto, una jornada laboral de ocho horas, «como en el resto de profesiones», con un salario acorde a la responsabilidad a la que se enfrentan diariamente.
«La retribución base de un médico es de 1.100 euros mensuales, en contra de lo que muchos puedan pensar, y la atención continua te la pagan a 19 euros la hora», reveló Carmen Andrés, quien fija en estas circunstancias la casuística que aboca hacia la carencia de personal en el ámbito comunitario.
A la hora de impulsar medidas paliativas, éstas tendrán que tener en León uno de los ejes sobre los que girar soluciones, ya que la provincia presenta uno de los ratios -médico por habitante-más bajos de Castilla y León.
Los comentarios están cerrados.