El Servicio Andaluz de Salud (SAS) empezó ayer los exámenes de su Oferta de Empleo Público (OEP) en cuatro categorías, a las que se han presentado 4.576 facultativos, el 81,60 por ciento de los 5.608 que solicitaron participar en las oposiciones de las cuatro categorías programadas para ayer, cuyos exámenes se desarrollaron con normalidad, según informó un portavoz del SAS.
La OEP está compuesta en total por casi 13.000 plazas y los primeros opositores que se examinaron ayer fueron los médicos de familia de Atención Primaria, Cuidados Críticos y Urgencias, Admisión y Documentación Clínica y Odonto-estomatólogos.
En la jornada de ayer la categoría con más aspirantes ha sido la de médicos de familia, a la que concurrieron 3.836 opositores, el 86,08 por ciento de los 4.456 que lo solicitaron. Para el domingo 25 de noviembre está previsto que se examinen los especialistas de área y los pediatras de Atención Primaria, según informó la Consejería de Salud.
Los opositores que realizaron ayer sus pruebas compiten por 1.415 plazas de médico de familia en Atención Primaria, setenta de médicos de familia de Servicios de Cuidados Críticos y Urgencias; otras nueve de Admisión y Documentación Clínica y 89 plazas de odonto-estomatólogos.
Evaluación
El sistema de evaluación es el concurso oposición, por lo que es necesario aprobar la fase de oposición para poder acceder a la fase de concurso. La fase de oposición, basada en el modelo de selección por competencias, consiste en la realización de tres pruebas, en las que se evalúan los conocimientos teóricos, las habilidades en la práctica profesional y la actitud del profesional en cuanto a aprendizaje y mejora continua, trabajo en equipo, orientación al ciudadano y orientación a objetivos. La primera prueba consiste en un cuestionario tipo test, en el que se evalúan los conocimientos del temario. El segundo examen se basa en la resolución de un caso clínico, mientras que el tercero es un ejercicio compuesto por 24 grupos de cuatro frases.
Una vez superada la fase de oposición, la fase de concurso valorará la experiencia profesional, el expediente académico, el doctorado, la formación especializada, la formación continua, la docencia, la investigación y las publicaciones de los aspirantes.
Según el SAS, estas pruebas permitirán que el sistema sanitario público andaluz alcance el 95 por ciento de estabilidad laboral en su plantilla, con lo que se convertirá en el sistema público de salud con mayor tasa de estabilidad del Estado.
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