Delegados sinicales de las Inspecciones de Trabajo y Seguridad Social se encerraron ayer en la sede madrileña del Ministerio de Trabajo continuando con las acciones programadas en el calendario de movilizaciones para reivindicar los "graves déficit" del organismo, informó CC.OO.
Desde el sindicato se asegura que las alternativas propuestas por la mesa de negociación no han sido tenidas en consideración por el director general de la Inspección, Raimundo Aragón.
Además, acusan a la Dirección General de ser "incapaz" de tomar las medidas necesarias para consolidar un servicio de calidad, mientras que la responsabilidad de los trabajadores de las Inspecciones "es lo único que está impidiendo que el caos se apodere de los centros de trabajo".
"Falta plantilla, faltan medios técnicos y medios de trabajo capaces de modernizar este organismo, se carece de una política de recursos humanos adecuada y los niveles salariales son completamente insatisfactorios", señaló la organización para añadir a continuación que "las huelgas convocadas para los meses de enero y febrero parecen irremediables si la Dirección General no es capaz de negociar el conjunto de medidas para superar las deficiencias existentes".
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