El Ayuntamiento de Barcelona creará un nuevo cuerpo de inspectores que se encargará de supervisar la tarea de las diferentes empresas concesionarias de la nueva contrata de limpieza que entrará en vigor el 1 de noviembre de 2009. Así lo establece el pliegue de condiciones del contrato 2009-2017, que ha consensuado el gobierno municipal –formado por el PSC e ICV-EUiA– con dos de los tres partidos de la oposición, CiU y ERC, y que se presentó ayer.
El pliego de condiciones no concreta el número de inspectores que se van a crear, así como las características de dicho cuerpo: si será personal laboral o funcionarios, o si estarán uniformados. Unos aspectos que, según explicó el edil de CiU Joan Puigdollers, tendrán que negociarse próximamente.
El alcalde de Barcelona, el socialista Jordi Hereu, valoró la "importancia" de este acuerdo, sobre todo porque ha sido consensuado con dos de los tres partidos de la oposición, aunque descartó que pueda ser interpretado como una antesala de modificaciones en la composición del gobierno municipal tras las elecciones generales del 9 de marzo.
Por su parte, la segunda teniente de alcalde y máxima responsable de servicios urbanos, Imma Mayol (ICV-EUiA), indicó que la contrata posibilitará que, en 2009, la limpieza y la recogida de residuos de Barcelona sea "menos ruidosa, menos contaminante y consuma menos agua", y también expresó su "agradecimiento" al PP por haber participado en las negociaciones.
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