Los programas electorales de los principales partidos para las próximas elecciones generales destacan la importancia del sistema de pensiones para garantizar el Estado de bienestar en España. Por ello, todos los partidos, a excepción de la formación de Gobierno, abogan por una reforma del sistema actual.
Aunque todos coinciden en garantizar la viabilidad de las pensiones, las recetas a aplicar difieren en cada formación política. Las propuestas van desde implantar un impuesto finalista vinculado a la financiación de las pensiones como propone el PSOE, hasta flexibilizar la edad de jubilación, como plantea Ciudadanos.
PP
El Partido Popular sitúa las pensiones como uno de los elementos «centrales» del sistema de bienestar social en España, por ello señala como su primer objetivo «fortalecer» el sistema actual de pensiones.
Así, se garantizará el sistema de pensiones para que sigan subiendo ahora y en el futuro, al tiempo que se reconocerá la maternidad en las pensiones con un complemento específico para las mujeres trabajadoras que han sido madres. Además, quienes trabajen más allá de su edad de jubilación no pagarán IRPF.
Para ello, los populares tienen previsto introducir un Fondo de capitalización para los trabajadores «al estilo del conocido como ‘sistema austríaco'», mantenido durante toda su vida laboral y que se haría efectivo en los supuestos de despido, de movilidad geográfica o en el momento de la jubilación.
El Partido Popular revisará la forma de cálculo del IRPF cuando se rescaten planes de pensiones. Ahora que las aportaciones de los planes de pensiones pueden rescatarse transcurridos diez años desde su constitución, quieren que la tributación de estos casos sea equilibrada. Por ello, promoverán que la parte de los fondos recuperados que corresponde al rendimiento de las inversiones sea tratada como ahorro y tribute a un tipo menor.
PSOE
El Partido Socialista por su parte considera un compromiso político «recuperar» la centralidad del Pacto de Toledo como una expresión de consenso básico para mantener y mejorar del sistema público de pensiones.
Para ello, el PSOE pretende retomar el marco legal vigente antes de la llegada de los populares al Gobierno. Se derogarían todos los cambios legales introducidos por el PP a lo largo de esta legislatura relacionados con este ámbito.
Así, la formación que lidera Pedro Sánchez propone mejorar los ingresos provenientes de cotizaciones sociales a través de la elevación gradual de las base máxima de cotización y de la mejora progresiva de las bases mínimas (vinculada al incremento del salario mínimo interprofesional).
Además, los socialistas contemplan incrementar progresivamente la financiación estatal a través de la creación de un nuevo impuesto finalista que estará dedicado a sufragar el gasto en pensiones.
CIUDADANOS
La formación liderada por Albert Rivera considera el sistema de pensiones como el «pilar fundamental» del estado de bienestar, por tanto estima necesario «reabrir» el Pacto de Toledo y consensuar entre todos sus firmantes una reforma que asegure la sostenibilidad y la transparencia del sistema.
Los ejes básicos de la formación naranja respecto a las pensiones contemplan que la fijación del importe se determine en función de las cotizaciones realizadas por cada trabajador durante toda su vida laboral.
Además, Ciudadanos defiende que cada persona decida «libremente» su edad de jubilación para acceder a una pensión suficiente. Así, sostienen que cualquier retraso en la edad de jubilación ha de implementarse de una forma «flexible» con el objetivo de no discriminar a los trabajadores que se hayan incorporado al mercado laboral a edades más tempranas o ejerzan actividades que exigen un esfuerzo físico considerable.
Por otro lado, aprobarán un nuevo Estatuto del Artista y el Creador para desarrollar medidas de protección y particularidades fiscales, como la posibilidad de compatibilizar la pensión de jubilación con la remuneración de trabajos puntuales derivados de la actividad creativa.
UNIDOS PODEMOS
Podemos propone derogar la reforma de las pensiones aprobada en el año 2010 por el PSOE así como la realizada por el PP en el año 2014. Por lo tanto se restablecería la edad de jubilación a los 65 años, así como la indexación de las pensiones al índice de precios de consumo (IPC).
Además, la confluencia entre Podemos e Izquierda Unida se compromete a «garantizar» la sostenibilidad del sistema de pensiones con la introducción progresiva de la financiación por vía impositiva tanto para las pensiones de «muerte y supervivencia» como para los pensionistas.
Por último, el partido indica en su programa que, en caso de gobernar, diseñará una estrategia que permita un aumento progresivo de las pensiones no contributivas a lo largo de los cuatro años de legislatura.
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