En un informe sobre la gestión económico financiera del supervisor bursátil durante el ejercicio 2013, el Tribunal de Cuentas indica que en ese periodo la CNMV contó con un número de directivos superior al permitido.
También objeta la compra de la actual sede de la CNMV, que fue adquirida en 2011 por importe de 70 millones de euros; el Tribunal de Cuentas señala que no quedaron debidamente acreditadas en el expediente las razones invocadas para justificar la adjudicación directa de la adquisición.
Asimismo, destaca que la decisión de comprar dicho inmueble se produjo cuando quedaban cuatro años para el vencimiento de un contrato de arrendamiento de las oficinas que hasta entonces constituían su sede de la CNMV, por lo que el incumplimiento de dicho contrato le ha costado al supervisor bursátil 2,6 millones de euros en concepto de indemnización.
No obstante estas previsiones, el Tribunal de Cuentas señala que las cuentas anuales de la CNMV reflejan la imagen fiel de su situación financiera y patrimonial.
Los comentarios están cerrados.