Sueño, cantidad y calidad

Todos necesitamos dormir, sin embargo no siempre lo hacemos las horas suficientes e incluso la calidad de nuestro sueño se ve en muchas ocasiones afectadas por factores externos, como ruidos, buenas condiciones del colchón, ambientación adecuada…; o internos como enfermedades, dolor, estrés…

La falta de descanso afecta notoriamente a nuestra calidad de vida. Dormir bien nos aporta múltiples beneficios: mejora nuestro estado de ánimo, favorece a la memoria, reduce el estrés o controla la obesidad entre otros.

Cada persona necesita unas horas diferentes de descanso y éstas cambian según la etapa de nuestra vida. El intervalo normal de sueño es de 7-9 horas por noche, aunque algunas personas pueden funcionar con solo 4 horas, mientras que otras necesitan 10 horas.

Adoptando buenos hábitos de actividad, horarios, dieta y ritmo de vida facilitarás el sueño:

• Evita comidas copiosas antes de acostarte.
• No tomes cafeína 6 horas antes de dormir.
• Acuéstate “sólo” cuando tengas sueño.
• Levántate aproximadamente a la misma hora (procurando respetar los ciclos de 90 minutos).
• No fumes ni bebas alcohol antes de ir a la cama.
• No veas televisión, leas o comas en la cama; si tienes problemas para dormir, la cama debe utilizarse sólo para eso.
• Cuando no consigas dormirte en una media de 20-30 minutos, no hay que permanecer en la cama sino salir de la habitación y realizar alguna actividad relajante como la respiración consciente. Debes regresar a la cama sólo cuando vuelvas a sentirte somnoliento y repetir este proceso tantas veces como sea necesario.

Estos consejos forman parte de los talleres de promoción de la salud del programa Sanitas Smile. El programa de salud y bienestar de Sanitas.