Recursos Humanos RRHH Digital El próximo lunes, 25 de noviembre, se celebra el Día Internacional Contra la Violencia de Género, una conmemoración que nos invita a reflexionar sobre la situación de las mujeres que aún hoy siguen sufriendo violencia, cualquiera que sea el tipo de ésta, por parte de su pareja o ex pareja sentimental.
Fruto de su compromiso con la integración laboral de las mujeres víctimas de la violencia de género, la Fundación Adecco ha elaborado, por segundo año consecutivo, un informe basado en una encuesta a 300 mujeres víctimas que han acudido a sus oficinas en busca de una oportunidad laboral durante el último año.
Una conclusión se dibuja con claridad: el empleo es, probablemente, la principal herramienta para combatir la violencia de género, ya que dota de autoestima a la víctima y le proporciona la autonomía e independencia necesarias para superar esta difícil situación.
Las denuncias por violencia de género descienden cada año
Desde el año 2008, venimos registrando una caída interanual en el número de denuncias por violencia de género. Si en 2008 se registraron 142.125, en 2012 la cifra descendió hasta el 128.477, una caída del 9,6%. Sólo entre 2011 y 2012 el descenso fue del 4,1%.
Por otra parte, entre enero y junio de 2013 se han contabilizado 60.982 denuncias por violencia de género, un 4,1% menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando se registraron 63.599. Si siguiéramos con este ritmo, finalizaríamos el año con 121.964 delaciones, un mínimo histórico que representaría la cifra más baja del último lustro.
Por Comunidades Autónomas, Andalucía, Madrid, Comunidad Valenciana y Cataluña –por este orden- son las regiones con un mayor volumen de denuncias en el primer semestre de 2013, representando un 21,8%, un 15,9%, un 13,8% y un 13,7% del total nacional, respectivamente.
En el otro lado, La Rioja (0,5%), Cantabria (0,9%) y Navarra (1%) son las Comunidades Autónomas con un menor volumen de denuncias registradas.
La crisis puede frenar las denuncias y alargar la violencia
La contracción del número de denuncias en los últimos años podría interpretarse como un reflejo de que el problema de la violencia de género se está mitigando.
Sin embargo, un año más, el informe de la Fundación Adecco ha querido ir más allá y ha preguntado a las encuestadas si la difícil situación económica es un factor que ha mermado su voluntad de denunciar. En efecto, la respuesta es rotundamente afirmativa: un 97% comenta que la crisis supone un freno para denunciar, por el temor a no encontrar empleo y verse sin recursos para salir adelante. Frente a ellas, tan sólo un 3% considera que la situación económica no influye en este sentido.
Según Arancha Jiménez, directora de operaciones de la Fundación Adecco: “la crisis puede alargar la situación de violencia de género, al incrementar la inseguridad de las víctimas para dar el paso de denunciar. Viendo ante sí el panorama laboral, temen no encontrar un empleo que les permita ser autónomas e independientes. Por este motivo, ahora más que nunca es necesario impulsar políticas que incentiven su participación en el mercado laboral, para que puedan recuperar su dignidad y libertad”.
Se pone así de manifiesto que el empleo es una herramienta esencial para combatir esta lacra social y la única herramienta que proporciona la autonomía y seguridad necesaria a las afectadas.
El empleo, un factor esencial
Otro de los resultados obtenidos apoya este axioma: la mayor parte de las encuestadas (un 65%) no tenía empleo en el momento en que sufrió la violencia de género y un 85% afirma que, si hubiera tenido trabajo, se hubiera sentido más fuerte y no hubiera alargado tanto la situación.
El perfil de la mujer víctima que acude a la Fundación Adecco
¿Cómo es la mujer víctima que acude a la Fundación Adecco en busca de una oportunidad laboral? Los datos de la presente encuesta dibujan el perfil de una mujer entre 36 y 45 años (47,1%), con 2 hijos (51%). Y según los resultados, la violencia de género no entiende de nivel formativo, ya que la situación está muy igualada. Sin embargo, existe un ligero predominio de mujeres con estudios elementales (27%), seguidas de las que tienen estudios secundarios (26%), estudios técnicos (25%) y estudios universitarios (22%).
Las que ya han encontrado empleo
¿En qué puestos y en qué sectores suelen encontrar trabajo las mujeres víctimas de la violencia de género? Es aventurado generalizar, ya que detrás de cada mujer hay una persona y unas circunstancias muy diferentes.
No obstante, la presente encuesta ha permitido identificar algunas áreas de actividad y perfiles que son más repetidos. La mayoría ha encontrado empleo en el sector servicios (79%), siendo el puesto más repetido el de teleoperadora, con un 20,6%. En segundo lugar se ha situado el de dependienta, con un 17,2%. También la atención a dependientes (niños, mayores, personas con discapacidad) ocupa un lugar destacado, con un 10,2%.
Más allá del sector y puesto que ocupan, destaca que sólo el hecho de tener empleo, ayuda a las mujeres a recuperar la autoestima y a superar con más facilidad su situación. Así, un 88% declara que el trabajo ha sido un gran apoyo para sentirse más fuertes y normalizar su vida.
La independencia, lo más valorado en el empleo
Si realizáramos una encuesta a la población general sobre lo que más valoran en su puesto de trabajo, probablemente obtendríamos respuestas como el horario flexible, el salario o la extensión del periodo vacacional.
Sin embargo, la situación es diferente en el caso de las mujeres víctimas de la violencia de género. Tras haber vivido una situación muy difícil, en ocasiones crítica, tienen muy claro que lo más importante para ellas es que su trabajo les proporcione independencia y autonomía (36,3%). En segundo lugar se sitúa la estabilidad: un 22% escoge este valor como principal. Por otra parte, un 14,4% antepone la posibilidad de incrementar su autoestima y sentirse realizada.
A continuación, un 13% alude al salario, seguidas de un 8,3% que destaca la posibilidad de entablar relaciones humanas y sentirse integrada en un grupo. Por último, un 5% selecciona el horario flexible como el principal valor de un empleo.
Transmitimos nuestro agradecimiento a todas las entidades que han colaborado en la difusión de la encuesta:
• Cap Oficina de la Dona Consell de Eivissa
• Intervenció Psicosocial per l’Orientació Laboral Servei d’Atenció a les Dones (Casa Galèria). Terrassa.
• Asociación Victoria, Comunidad de Madrid.
• Aprodemm (Asociación pro derechos de la mujer maltratada Navarra)
• Servei d’Intervenció Especialitzada (SIE) de Tarragona.
• Centros Mujer 24 Horas. Conselleria de Bienestar Social. Comunidad Valenciana.
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