La inversión extranjera directa (IED) en España continúa siendo clave para el crecimiento económico del país, consolidando su atractivo como destino para capitales internacionales en sectores estratégicos. En 2023, la IED totalizó 28.215 millones de euros, manteniéndose en la media de los últimos cinco años. Este fuerte desempeño destaca la solidez de la economía española en un contexto global desafiante, donde los inversores apuestan particularmente por servicios, industria, y cada vez más, educación.
El sector educativo, en especial, ha captado un interés creciente de inversores extranjeros, alcanzando una inversión de 162,64 millones de euros en el primer semestre de 2024, lo que representa un aumento significativo en comparación con años previos y posiciona a la educación como un área de desarrollo clave. Esta tendencia es visible en Catalunya, con una inversión extranjera total de 4.733, 83 millones, suponiendo un 40,37% del estado y donde la capital catalana se ha consolidado como un centro educativo y tecnológico de referencia en Europa. La ciudad, con su red de universidades de prestigio y un ecosistema innovador representa una importante porción en el sector educativo.
Según Diana Filipescu de TBS Education-Barcelona “esta significativa inyección de capital está impulsando el desarrollo de infraestructuras educativas y tecnológicas en Catalunya, permitiendo la creación de nuevos laboratorios, centros de investigación de última generación, y la modernización de instalaciones académicas en universidades y centros de formación avanzada. Estas mejoras refuerzan el atractivo de Catalunya como destino educativo de alta calidad, y en concreto el de Barcelona como hub educativo». La inversión en Catalunya contribuye a la creación de centros de investigación, instituciones de educación superior y programas formativos avanzados, generando una sinergia que refuerza la competitividad de la región. Estas sinergias no solo amplían la red de conocimiento e innovación en Catalunya, sino que también posicionan a la región como un punto de referencia global para la investigación y el desarrollo.
Las escuelas de negocio y zonas como el 22@ en Barcelona cumplen un papel fundamental en la atracción de inversión extranjera hacia sectores de alto valor añadido en España. Estas áreas aglutinan talento, innovación y desarrollo, aspectos clave para inversores que buscan entornos dinámicos y conectados globalmente. “La creciente inversión extranjera en educación y tecnología en Catalunya es una señal de confianza en el talento y las oportunidades de esta región, y estamos comprometidos en fortalecer su impacto a través de nuestros programas académicos.” apunta Filipescu.
El 22@ se ha convertido en un referente para empresas tecnológicas y centros de formación avanzada, creando sinergias entre negocios, investigación y educación. Estos hubs, junto con la capacidad productiva española, impulsan el crecimiento económico y posicionan al país como destino estratégico para inversiones educativas.
Un atractivo en diversas áreas clave
- Crecimiento en innovación y sostenibilidad: Catalunya ha atraído capital extranjero en áreas como la investigación y el desarrollo sostenible, con una inversión significativa en proyectos de economía circular y energías renovables, potenciando su compromiso con un crecimiento sostenible.
- Atracción de talento internacional: Con instituciones educativas de prestigio y una creciente oferta de programas en inglés, Catalunya se ha convertido en un destino líder para estudiantes y profesionales de todo el mundo, generando un entorno multicultural y competitivo.
- Impulso a la creación de empleo de alto valor: La inversión en sectores estratégicos ha generado empleos especializados en áreas como inteligencia artificial, analítica avanzada y desarrollo sostenible, elevando el perfil económico de la región.
Mirando hacia el futuro, Catalunya se proyecta como un referente clave en Europa para la inversión en sectores estratégicos de alta innovación y educación. Con una estrategia enfocada en atraer más inversión internacional y desarrollar políticas que apoyen la investigación, el desarrollo tecnológico, y la educación de calidad, Catalunya está preparada para afrontar los desafíos globales y consolidarse como un centro de referencia para el conocimiento y la innovación.