PageGroup, líder en selección de mandos intermedios y directivos, con más de 25 años de experiencia en España, desvela un nuevo estudio realizado en colaboración con el Centre for Economics and Business Research (CEBR). A pesar de los esfuerzos por hacer el entorno laboral más inclusivo, los datos revelan que España ocupa el puesto 28 de 82 países en el Índice de Movilidad Social del Foro Económico Mundial. Según este índice, se necesitarían cuatro generaciones para que una persona nacida en una familia con bajos ingresos alcance los ingresos medios en España.
El informe destaca la urgente necesidad de promover la movilidad social a través del trabajo, y pone de relieve el papel clave que pueden desempeñar las empresas en este proceso. «Si bien las compañías no pueden resolver todos los problemas de desigualdad, tenemos la capacidad de influir positivamente mediante la creación de un entorno laboral más inclusivo», afirma Jaime Asnai González, Director General de PageGroup España y Portugal.
Un impacto positivo en la economía y en las empresas
Mejorar la movilidad social no solo impulsa el progreso social, sino que también ofrece un importante beneficio económico. Según el estudio, si España mejorara su índice de movilidad social en solo dos puntos sobre el índice de movilidad social del FEM, se podrían añadir 173.000 personas a la población activa, lo que generaría un aumento potencial de 9.500 millones de euros en el PIB anual del país.
Además, fomentar la diversidad socioeconómica en el lugar de trabajo ofrece múltiples beneficios a las compañías, como el aumento del compromiso y la fidelización de los profesionales. Cuando los empleados de diversas culturas se sienten valorados y respetados, es más probable que se comprometan con la misión de la organización. Este sentido de pertenencia también favorece que los trabajadores permanezcan en la empresa a largo plazo, lo que puede mejorar los niveles de productividad y fidelización.
Por otro lado, una plantilla diversa también contribuye a una mejor comprensión de las necesidades de los clientes y los mercados. Los profesionales de distintas culturas aportan valiosos conocimientos sobre las tendencias del mercado, los matices culturales y el comportamiento de los consumidores, permitiendo a las compañías adaptar sus productos y servicios de forma más eficaz para públicos diversos.
Medidas concretas para mejorar la movilidad social
El informe de PageGroup no solo analiza la situación, sino que también ofrece soluciones prácticas para que las empresas puedan fomentar la movilidad social. Entre las medidas, destacan:
- Contratación flexible: adaptar los procesos de selección para facilitar la participación de personas con diferentes necesidades, incluyendo entrevistas remotas y reembolso de gastos de desplazamiento.
- Programas de prácticas y aprendizaje: crear oportunidades para personas de diversas culturas mediante programas de formación y desarrollo.
- Descripciones de puestos inclusivas: utilizar un lenguaje claro y accesible en las ofertas de trabajo para atraer a candidatos de diferentes entornos.
Un compromiso a largo plazo
PageGroup se ha comprometido a implementar las medidas de «Nivel 1» descritas en el informe en todas sus oficinas de España para finales de 2024, y tiene previsto alcanzar las de «Nivel 2» para 2025. Las medidas de «Nivel 1» incluyen acciones iniciales como la creación de descripciones de puestos inclusivas, procesos de contratación más flexibles y programas de prácticas accesibles. Las de «Nivel 2» se centran en iniciativas más estructuradas, como programas de tutoría y Grupos de Recursos para Empleados (GRE) que fomentan el sentido de pertenencia y apoyan el crecimiento de profesionales de entornos socioeconómicos bajos.
«Mejorar la movilidad social dentro de las empresas puede ser un desafío, pero es esencial. Y requiere un esfuerzo coordinado para eliminar barreras y crear oportunidades que permitan prosperar a personas de cualquier cultura», asegura Gema Martín, Head of People & Culture Business Partner de PageGroup, quien añade: «Fomentar un entorno inclusivo centrado en la igualdad para todos no solo enriquece nuestra fuerza laboral, sino que también impulsa un cambio social positivo».