Las personas LGTBI mejoran su visibilidad en los entornos laborales pero el ‘techo arcoíris’ persiste y todavía un 26% vuelve al armario cada día para ir a trabajar. Un nuevo estudio de BBVA y REDI analiza la experiencia de las compañías españolas en la gestión de la diversidad LGTBI, el clima laboral y el impacto de las políticas de diversidad e inclusión, tanto en las organizaciones como en sus plantillas.
La mitad de los encuestados en el estudio afirma haber visto modificada la cultura empresarial tras la gestión explícita de la diversidad LGTBI en sus empresas. “Los datos nos enseñan que existe un mayor entendimiento de la realidad de las personas LGTBI en el contexto laboral y la generación de espacios de trabajo seguros donde puedan ser ellas mismas”, indica Cristina Gabriel, responsable de Diversidad en BBVA. Las personas entrevistadas consideran que ha mejorado el clima laboral tanto para las personas LGTBI como en general, así como la cultura corporativa. “Hablar de manera explícita y normalizada de un tema aún sensible y estereotipado como es la diversidad LGTBI, genera conversaciones personales que elevan la empatía y el liderazgo inclusivo”, añade.
Un 75% de las personas LGTBI, pero también un 47% de las aliadas -es decir, sensibilizadas con la inclusión-, afirma haberse visto impactadas personalmente por la gestión explícita de la diversidad LGTBI en sus empresas. Adicionalmente, la mitad afirma haber mejorado su liderazgo y su grado de compromiso en el trabajo, y un 39% su productividad. “Tener políticas concretas para asegurar la igualdad de oportunidades y atender las necesidades específicas de las personas LTGBI beneficia al rendimiento, liderazgo y la retención del talento. Al sentirse más aceptadas y capacitadas para ser ellas mismas, mejoran su satisfacción, compromiso, y productividad”, defiende.
En la primera parte del informe, que vió la luz a finales de 2023, se puso el foco en la relación de las empresas con la realidad LGTBI desde el punto de vista de los responsables de recursos humanos y/o diversidad. Con esa información se pudo demostrar que aunque la diversidad por orientación sexual y expresión de género ya se trabaja en un 49% de las grandes empresas españolas, existe una clara oportunidad para implementar estrategias transversales para este tipo de diversidad y políticas de tolerancia cero ante potenciales discriminaciones y lenguajes no inclusivos. Esta segunda ola del estudio indaga precisamente en el sentir de la plantilla y su punto de vista con relación a la inclusión LGTBI por parte de sus empresas.
La inclusión de la diversidad LGTBI mejora el bienestar de las plantillas
“Gestionar con naturalidad la diversidad LGTBI supone todavía un gran reto por el desconocimiento hacia las problemáticas que aún tiene que enfrentar el talento LGTBI en el entorno laboral”, afirma Óscar Muñoz, codirector de REDI. “Cuando se proporcionan recursos para la mejora del clima laboral y se erradican sesgos en los procesos de selección, promoción o trato diario con las personas LGTBI empleadas, las empresas obtienen importantes beneficios como la generación de espacios más seguros e inclusivos, la mejora del clima laboral, el cumplimiento normativo, el entendimiento del mercado, la visibilidad en el mercado y la marca empleadora”, añade.
Los datos nos confirman que las personas LGTBI no se sienten seguras para visibilizarse en su lugar de trabajo por miedo a repercusiones en su carrera laboral o en la relación con sus compañeros. Y esto ocurre incluso en aquellas empresas más avanzadas en la gestión de la diversidad. Esta ‘discreción preventiva’ perjudica su progresión profesional y a la igualdad de oportunidades y crea el llamado ‘techo arcoíris’”, explica el responsable de REDI.
Las personas LGTBI han mejorado su visibilidad pero la inseguridad y el miedo persisten. Aunque el 72% de las personas LGTBI encuestadas están totalmente fuera del armario en su vida privada, solo el 50% se atreve a visibilizarse con naturalidad en el trabajo. A ellas se suma otro 24% que se encuentra fuera del armario con la mayoría de compañeros/as de trabajo. “Eso significa que un 26% de las personas LGTBI vuelve al armario cada día al ir a trabajar en las empresas asociadas a REDI”, detalla Muñoz.