El verano es un momento que muchas personas relacionan con la desconexión, las vacaciones, y disfrutar al aire libre de los largos días del verano. Sin embargo, cuando se trata de búsqueda de empleo, siempre está la pregunta de si es conveniente aprovechar este momento o tomar un descanso.
En este artículo, consideraremos cómo el verano puede convertirse en esa excelente ocasión para trabajar en tu marca personal y avanzar en tu desarrollo profesional, aprovechando las interacciones sociales y las redes de contactos.
La Marca Personal: una herramienta clave no estacional
La Marca Personal es la huella que dejamos en los demás, la imagen que tienen de ti en el ámbito profesional, ya Tom Peters acuñó el término en en sus primeros artículos y en la actualidad se ha convertido en una herramienta clave. Es combinar tu presencia en redes, tu reputación, tus habilidades y tu red de contactos. Pero en un mundo competitivo donde a veces compartimos los mismos ingredientes, donde diferenciarse no es fácil, hay que trabajar en tu Marca Personal no de manera aislada, sino con dedicación permanente.
Durante el verano, hay diferentes formas de fortalecer la Marca Personal:
- Actualización de perfiles profesionales: aprovecha el tiempo libre para revisar y actualizar perfiles en redes sociales profesionales. Asegúrate de que tu experiencia, habilidades y logros recientes estén al día.
- Generación de Contenido: comparte artículos, opiniones y logros. Esto no solo mantiene el perfil activo, sino que demuestra tu interés por el desarrollo profesional.
- Formación permanente: participa en cursos online, webinars, o talleres que desarrollen tus habilidades.
- Participar en acciones de voluntariado: conecta con proyectos relacionados con tus valores o intereses y adquirir nuevos conocimientos transferibles a la sociedad. Te brinda la oportunidad de aumentar la red de contactos.
Las relaciones interpersonales en verano: una oportunidad única
El verano es una estación propicia dinamizar las relaciones sociales. Reuniones con amistades, salidas a diferentes destinos, practicar deporte, nos llevan a simples momentos de ocio que se pueden convertir en las claves para comunicar la situación laboral, y ampliar la red de contactos.
- Conversaciones informales: en contextos donde no hay presión, relajados, es más fácil hablar de tus intereses y proyectos profesionales. Aprovecha estos momentos para mencionar que estás en búsqueda de oportunidades laborales, y ten preparado tu «para qué»,»nunca se sabe dónde puede estar la oportunidad».
- Aumentar la red: las actividades sociales permiten conocer nuevas personas, quienes podrían estar relacionadas o mostrar interés con tu campo profesional. No infravalores el poder del Networking informal.
- Dinamismo de la red: después de interactuar con nuevas personas, asegúrate de mantener el contacto. Envía mensaje de recordatorio y conecta en redes profesionales para mantener una relación sólida y formal.
¿Tirar la toalla o seguir pescando?
Si bien es tentador tomar una desconexión total durante el verano, esta temporada puede ser un momento de cambio de estrategia, y de iniciar acciones que mejoren la búsqueda de empleo. Razones para que no tires la toalla y sigas pescando:
- Menos competencia: muchas personas piensan que hay que parar la búsqueda de empleo ya que las empresas se paralizan en verano. Por ello puede ser un buen momento ya que hay menos competencia y aumentan las posibilidades de destacar, realizar autocandidaturas.
- Oportunidades temporales: algunas empresas buscan cubrir puestos temporales o por proyectos específicos en verano debido a la estacionalidad, lo que puede ser una opotunidad para puestos más permanenete en el futuro.
- Calentamiento para septiembre: mantener la actividad en verano, permite una mejor preparación y posicionamiento cuando llegue septiembre, época donde muchas empresas retoman sus procesos de selección y contratación con más determinación.
En conclusión, no hay una respuesta única a si desconectar o continuar con la búsqueda de empleo. Sin embargo mantener una actitud proactiva, utilizar este tiempo para fortalecer la marca personal y generar nuevos contactos puede ser una inversión valiosa a futuro. El verano puede convertirse en un escenario menos competitivo para destacar y preparar el terreno para septiembre, cuando la actividad en las empresas suele reactivarse.
La clave está en encontrar el punto medio entre aprovechar el verano para «recargar las pilas» y prestar atención a las oportunidades que puedan surgir. La búsqueda de empleo no es estacional, y cada momento puede ser determinante para seguir avanzando en la carrera profesional.
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