En los últimos tiempos, la rotación de personal se ha convertido en una de las grandes preocupaciones para las empresas, que ven como sus empleados, cada vez están más dispuestos a dejar su trabajo. De hecho, según datos de la Eurostat, alrededor de un 3% de las personas ocupadas pasan a una situación de desempleo anualmente en España. De esta forma, el 58% de las empresas españolas considera la retención de talento como uno de sus principales desafíos, según el informe realizado por InfoJobs.
La desmotivación de las plantillas cada año se dispara más, haciendo tambalear la estabilidad de los equipos. Así, el 32% de los empleados afirman sentirse poco o nada valorados en su empresa, lo que supone un 12% más si lo comparamos con el año anterior, tal y como apunta el Informe de Tendencias en Beneficios para Empleados y Empleadas realizado por Cobee. Esto ha llevado a que uno de cada tres españoles se planteé dejar su empresa en los últimos meses.
Entre las causas que han propiciado este aumento de la rotación laboral se encuentra no solo la falta de motivación por parte de los trabajadores, sino también los sueldos bajos. Así lo asegura casi la mitad de los españoles (47%), que dicen sentirse mal pagados por su compañía.
Otra de las causas de este declive ha sido las dificultades para poder conciliar la vida personal y la profesional y la poca flexibilidad lo que ha llevado a los equipos a un desgaste generalizado, confirmando que el dinero no lo es todo. Así, 1 de cada 2 españoles valoran la flexibilidad horaria y el ambiente laboral por encima de cualquier otro aspecto.
“Además de esto, existe una necesidad real por parte de los equipos a la hora de continuar con su formación. Las nuevas tecnologías y la IA han provocado la curiosidad de las plantillas por aprender más de ellas. Tal es así que el 56% de los españoles asegura que es importante seguir formándose y afirma estar haciendo algún curso, aunque la realidad es que el 39% de las empresas no cuenta con ninguna iniciativa ni ayuda para ofrecer a sus empleados cursos de formación que les ayude a mejorar sus habilidades y a mantenerse al día de las novedades en su puesto de trabajo”, declara Borja Aranguren, CEO y cofundador de Cobee.
Pese a que cierto grado de rotación es inevitable en cualquier empresa, una alta tasa de rotación puede tener efectos negativos y perjudiciales en la estabilidad, la eficiencia y los resultados de una organización. Además de esto, trae consigo un incremento de los costes empresariales, ya de por sí acrecentados en el último año. De hecho, se estima que, en España y a grandes rasgos, por cada persona que se va, la empresa gasta el equivalente al 30% de su salario anual. Esto quiere decir que, para un sueldo de 24.000 euros al año, la compañía desembolsaría 7.2000 euros, en el caso de personas con un perfil medio técnico y cuya experiencia en la empresa se sitúa en torno a los 12 meses.
“Si necesitamos reemplazar a un rango superior, como un CEO o lo que se conoce como C-suite position, los costes se disparan. El gasto de este reemplazo podría superar perfectamente el 150% de su salario anual, llegando incluso al 400%”, asegura Aranguren.
Ante esta situación, las compañías deberán tener en cuenta y revisar el proceso de reclutamiento y selección de personal, además de diseñar una experiencia onboarding a medida, saber identificar las necesidades de la plantilla, comunicar de manera efectiva y promocionar los beneficios y aprender a medir los resultados obtenidos, tal y como se aborda en la Guía para calcular los costes de la rotación laboral elaborada por Cobee.