Considerar un proceso de selección como un mero ejercicio de búsqueda de un profesional para incorporar a una organización es un grandísimo error.
En realidad, durante el proceso de selección lo que se está haciendo, consciente o inconscientemente, es lanzar un enorme mensaje al mercado. Y no aprovecharlo para hacer un adecuado branding de marca es desperdiciar una excelente oportunidad de diferenciación.
Sobre todo, si se tiene en cuenta que el mensaje se está lanzando sobre el segmento de profesionales que, en un momento u otro, podrían ser target. Por tanto, si la empresa es capaz de generar buena fama, esta remará a su favor. Si se genera una mala impresión, se notará en la capacidad de atraer los profesionales adecuados.
La forma en que una compañía trata a los profesionales que participan en sus procesos, la información que se comparte con ellos, el tipo de respuesta que se les da y el análisis del feedback que se recibe de ellos, van a determinar como la organización es percibida en un mercado cada vez más estrecho y más competitivo.
Conscientes de esta realidad, desde mesobratalento, unidad de Touch in Touch dedicada a la experiencia de candidato, se organizan desayunos periódicos con profesionales en búsqueda de un nuevo reto profesional.
En estos desayunos, en los que se reúnen profesionales de distintos sectores y áreas de conocimiento con los socios de Touch in Touch, se genera un foro de discusión que gira, fundamentalmente, alrededor de 3 ejes.
- Experiencias vividas en los procesos de búsqueda
- Buenas y malas prácticas y cómo dar respuesta a una y otras
- Conocer y compartir la experiencia de un head hunter con más de 20 años de experiencia en el mercado de la selección y poder tener la perspectiva “del otro lado de la mesa”
Se trata de generar un entorno en el que ambas partes ganen a partir de compartir puntos de vista y experiencias.
Los profesionales en búsqueda de nuevo proyecto se benefician de las experiencias de quienes están pasando por un momento similar, comparten sus dudas y sus experiencias, se sienten acompañados y comprendidos, obtienen indicaciones y tips de un experto y generan nuevas ideas y lo que es más importante, nuevas actitudes, para afrontar su búsqueda.
No es lo mismo hacer “la travesía del desierto” en soledad, que saber que, si se da un tropezón, siempre habrá alguien que tienda una mano y ayude a levantarse o alguien que ayude a despejar las dudas que, en esa situación, crecen sin que se las cultive.
Y esto, tanto por la compañía de otros profesionales en situación similar como por la de una consultora, como profundos conocedores de lo que demanda el futuro empleador.
Por su parte, Touch in Touch recibe una valiosísima información de parte de los profesionales en transición, fruto de las circunstancias vividas por ellos, de las respuestas que reciben y de la visión del estado del arte que transmiten. Todo ello resulta información de alto valor para Touch in Touch a la hora de asesorar a sus clientes, acercando el mundo real al corporativo.