La irrupción de la Generación Z en el mercado del trabajo está trayendo consigo nuevos desafíos y oportunidades para las empresas. Uno de los fenómenos más relevantes es la «ambición silenciosa», conocida por su traducción en inglés como ‘quiet ambition’, donde los jóvenes priorizan el equilibrio entre vida en el trabajo y personal, por sobre el ascenso interno.
Hace aproximadamente un año, un artículo en la revista Fortune discutía sobre la transición hacia lo que denominaron la «era de la ambición silenciosa», señalando cómo los trabajadores más jóvenes ya no buscan el éxito por el mero hecho de alcanzar metas. Y según señala un estudio de fines de 2023 realizado por la plataforma canadiense de RR.HH. Visier, este cambio de actitud está llevando al declive de la jerarquía corporativa, ya que los empleados prefieren evitar roles de liderazgo en favor de disfrutar de su tiempo libre.
Por su parte, Forbes destacó en una nota periodística, que se hizo viral en Europa, el impacto que genera el que esta fuerza laboral está cambiando su percepción de éxito en el ámbito profesional.
“En lugar de seguir una trayectoria corporativa tradicional, los colaboradores están empezando a priorizar su vida personal. Esta nueva tendencia presenta desafíos y oportunidades para las empresas. Por un lado, las estructuras jerárquicas rígidas y la falta de flexibilidad podrían dificultar la atracción y retención de este talento joven. Por otro lado, las empresas que se adapten a las necesidades de la Generación Z podrán encontrar en ellos una fuente de creatividad, innovación y capacidad de adaptación”, comenta Cristóbal Guivernau, Manager de TackTMI, compañía experta en capacitación y desarrollo organizacional y de personas.
Pero ¿cuáles son los aspectos que más valoran los profesionales Z y en los que las compañías deben poner acento?
- Flexibilidad laboral: La posibilidad de trabajar desde casa, en horarios flexibles o incluso adoptar modelos de trabajo híbridos.
- Bienestar mental: Un ambiente de trabajo saludable donde se fomente el equilibrio entre vida laboral y personal.
- Desarrollo profesional: Oportunidades de capacitación, cursos y talleres para adquirir nuevas habilidades y crecer dentro de la empresa.
- Valores alineados: Una misión, visión y valores de la empresa que sean atractivos y con los que se identifiquen.
- Reconocimiento: Sistemas de recompensa que valoren los logros individuales y no solo los ascensos.
- Comunicación efectiva: Canales para expresar ideas, sugerencias y preocupaciones.
Un estudio de Visier de agosto de 2023 encontró que solo el 4% de los empleados estadounidenses a tiempo completo consideran que ascender a la dirección ejecutiva es uno de sus principales objetivos profesionales. Mientras que un estudio de Gartner de ese mismo año encontró que las empresas que no se adapten a las necesidades de la Generación Z podrían experimentar una rotación de empleados del 30% en los próximos años.
Si bien el 75% de los jóvenes de la generación Z reportaron sentirse al menos algo felices, este porcentaje disminuye considerablemente a medida que avanzan hacia la adultez. Además, aquellos entre 18 y 26 años son menos propensos a evaluar positivamente sus vidas en comparación con generaciones anteriores en el mismo rango de edad. Esta menor felicidad podría estar relacionada con su tendencia a evitar altos cargos, que algunos expertos atribuyen al miedo al estrés y a la búsqueda de un equilibrio entre la vida laboral y personal.
“Las empresas tienen un desafío enorme ahora, partiendo por el cambio de mentalidad, que es fundamental, ya que se deben dejar atrás la idea de que “más horas, más productividad”, y adoptar una cultura que valore el bienestar personal y la flexibilidad laboral. Además, se necesitan nuevas formas de medir y gestionar el desempeño de los empleados, que vayan más allá de las horas trabajadas. Y Finalmente, la importancia de la selección de líderes, donde las habilidades blandas, empatía, comunicación afectiva y el liderazgo ejemplar, son esenciales en posiciones gerenciales”, comenta Sarah Machado, Manager de Wyser.
La que sí aparece como una de las demandas clave de los jóvenes de esta generación para mantener su lealtad a las empresas es el crecimiento profesional que estas les ofrecen. Según una encuesta realizada por Amazon y Workplace Intelligence, la principal razón para que las personas de la generación Z renuncian a sus trabajos es si perciben una falta de oportunidad de desarrollo.
«La ‘ambición silenciosa’ no solo representa un cambio en las expectativas laborales, sino también una oportunidad estratégica para las empresas que sean receptivas a esta evolución. Adaptarse a las nuevas necesidades del mercado implica crear entornos de trabajo que no solo sean atractivos, sino también flexibles. Estas empresas estarán en una posición óptima para atraer y retener el talento joven, lo que no sólo impulsará su crecimiento, sino que también mejorará su competitividad en un entorno empresarial en constante cambio», concluye Guivernau