El fútbol americano se sigue en Estados Unidos con tanta pasión como el fútbol en Europa. En Internet abundan los simuladores de ligas virtuales, donde los aficionados se ponen en la piel de un mánager o un entrenador para cumplir un sueño que en la vida real nunca estuvo a su alcance: dirigir su propio equipo.
El problema surge cuando se lleva a cabo esta actividad en horas de oficina. Según un estudio elaborado por Challenger, Gray & Christmas, Inc, durante la temporada regular de fútbol americano en los Estados Unidos las empresas pierden 500 millones de dólares a la semana por el descenso en la productividad de sus empleados. Afortunadamente para los empresarios, la temporada de la NFL es corta: dura sólo 17 semanas, desde septiembre hasta finales de enero.
El estudio estima que nada menos que 37 millones de jugadores dedican una media de 50 minutos a la semana (en horario laboral) a gestionar sus equipos virtuales. Esta actividad, junto con el póker online y las subastas de eBay, suponen las principales distracciones del trabajador.
Y sin embargo, esta actividad no es perjudicial, dice la firma de Recursos Humanos que ha elaborado el estudio. Todo lo contrario, pues refuerza la camaradería en la oficina, mejora el ambiente laboral y permite hacer contactos que se pueden aprovechar para el negocio.
Si se prohibiera a los empleados entrar en estas webs, el daño en términos de lealtad a la empresa y moral del trabajador sería mayor que las pérdidas que genera el pequeño desahogo de jugar durante unos minutos al día. De hecho, la firma recomienda a las empresas que alienten la participación en estos simuladores, por ejemplo creando ligas internas para sus empleados.
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