El profesor y titular de la Cátedra de Economía y Etica del IESE, Antonio Argandoña, consideró hoy que la reforma laboral pactada entre Gobierno, patronal y sindicatos es sólo «cosmética» y no resolverá los problemas del mercado laboral español, entre ellas la temporalidad.
Argandoña, miembro del consejo de redacción de los «Comentarios de Coyuntura Económica que edita esta escuela de negocios, consideró que las medidas pactadas no resolverán el problema de la temporalidad, pero sí tendrá «efectos positivos a corto plazo de cara a las elecciones generales con la reducción de las cifras de paro».
En un almuerzo-coloquio con periodistas, Argandoña cuestionó el hecho de que se use «dinero público y parte del superávit del Estado» para subvencionar a determinados colectivos, como jóvenes o mujeres, a los que se ofrecerán «contratos recortados y protegidos».
Asimismo, fue especialmente crítico con la patronal CEOE, al considerar que «las empresas españolas no tienen interés en promover otra solución». «Con el pacto alcanzado tendrán a los sindicatos tranquilos y lograrán mano de obra barata vía contratos temporales e inmigración», argumentó.
Por su parte, el director del IESE en Madrid, Juan José Toribio, también cargo contra la reforma. «El Gobierno está muy contento, la patronal también, los sindicatos lo mismo, y también el PP. Si todo el mundo está contento es que han reformado muy poco», sentenció. A su juicio, «nadie ha consultado al contribuyente, que es quien deberá subvencionar los nuevos contratos».
Toribio estimó que la solución a los desequilibrios del mercado laboral en España pasa por «reducir las indemnizaciones en caso de despido y aumentar las cuantías de la protección del seguro de desempleo», en línea con lo que han hecho en Suecia, Dinamarca y Noruega.
«La solución no es el modelo de EE.UU ni tampoco el de Francia», afirmó Argandoña, quien en un artículo suyo publicado en «Comentarios de Coyuntura» sostiene que el fallido contrato de primer empleo impulsado por el primer ministro Dominique de Villepin «era una trampa para que los jóvenes quedaran enganchados durante años a contratos temporales».
A la escuela de negocios de la Universidad de Navarra tampoco le gusta la reforma del IRPF, aunque ve elementos positivos. Toribio criticó que el Gobierno del PSOE haya impulsado una reforma «menor», que cuestiona el principio de estabilidad tributaria.
No obstante, vio con buenos ojos que se grave con un tipo fijo del 18% a las rentas de capital sea cual sea el plazo u origen de las rentas.
Toribio defendió la aplicación de «un tipo único impositivo relativamente bajo en el IRPF, la reducción sustancial del Impuesto de Sociedad, e igualar estos dos tributos con el IVA», todo ello sin ningún tipo de desgravación cualquiera que sea el origen de las rentas.
«Es el sistema que se aplican en los nuevos países incorporados a la UE, como Lituania, donde se aplica un tipo único del 24% en IRPF, IVA y Sociedades», consideró Toribio, quien, no obstante, consideró que en este caso es más fácil «porque parten de cero».
Los profesores del IESE se mostraron favorables a invertir en energía nuclear y acabar con la actual moratoria. «Con Chávez en Venezuela subiendo impuestos al petróleo, Evo Morales nacionalizando hidrocarburos, Nigeria en guerra civil y Oriente Medio hecho un polvorín no se entiende que las nucleares se prohiban aquí», dijo Tobías.
Los comentarios están cerrados.