La decisión en 2004, de los secretarios generales de la CIOSL y CMT, Guy Ryder y Willy Thys, de iniciar un proceso de unidad entre ambas organizaciones que concluyera en la creación de una nueva Confederación Sindical Internacional (CSI)
Ambos dirigentes definieron el proyecto en el Foro Sindical Mundial de Porto Alegre (enero de 2005) como una alternativa para la acción sindical frente a los retos de la globalización, la actividad de las empresas multinacionales, los gobiernos nacionales y las organizaciones multilaterales culminará en el Congreso constituyente de la nueva central sindical que tendrá lugar en Viena, del 1 al 3 de noviembre próximos, tras los congresos de disolución de la CIOSL y la CMT.
La nueva Confederación se declara unitaria y pluralista y será un mejor y más representativo instrumento del movimiento sindical para enfrentarse a los retos que la globalización plantea al mundo del trabajo. Junto con las Federaciones Sindicales Internacionales (FSI), será el único instrumento de impulso y coordinación de las luchas para generalizar los derechos sindicales y el trabajo decente en los sistemas de producción globales regidos por la actividad de las empresas multinacionales, y sus filiales, proveedoras y subcontratadas, y ante las instituciones internacionales multilaterales.
En su declaración de principios, incluida en los Estatutos, la CSI “asume la tarea de combatir la pobreza, el hambre, la explotación, la opresión y la desigualdad mediante las acciones internacionales impuestas por las condiciones de la economía globalizada, y para una gobernanza democrática que tenga en cuenta los intereses de los trabajadores y trabajadoras, que considera más importantes que los del capital.”
La nueva Confederación se propone “aportar una representación efectiva a los trabajadores y trabajadoras, independientemente de dónde trabajen y en qué condiciones. Se compromete a proporcionar solidaridad práctica a todos aquéllos que la necesiten, y a hacer frente a las estrategias globales del capital con estrategias globales de los trabajadores/as”. Y considera “que el respeto universal de los derechos de los trabajadores y trabajadoras, y el acceso al trabajo decente resultan indispensables para un desarrollo justo y sostenible” y se compromete a promover y actuar para la protección de la democracia en todo el mundo.
Uno de los objetivos de la propuesta es que a la nueva central se sumaran, desde el mismo momento de su constitución, aquellas centrales nacionales democráticas y representativas que no estuvieran afiliadas a ninguna internacional. Los órganos de dirección que elegirá el Congreso serán el Consejo General y el Secretario General. El Consejo General tendrá 79 miembros: 70 representarán a las afiliadas, distribuidos por regiones geográficas, 7 lo serán a propuesta del Comité de mujeres y 2 por el Comité de jóvenes. A ellos se añadirá el/la secretario general y el /la presidente (elegido/a por el Consejo). Además de los miembros titulares se nombrarán suplentes primeros y segundos de cada puesto. En la CIOSL, cuyo modelo se traslada a la CSI, los suplentes pueden asistir con voz pero sin voto a las reuniones. El Consejo General elegirá un Buró Ejecutivo de 25 miembros
Se ha acordado crear el Consejo de Global Unions, del que formarán parte 3 representantes de la CSI, 3 del TUAC y otros tres de cada una de las FSI. La FITIM (metal) no está de acuerdo en participar en este organismo de coordinación. Las FSI asistirán como invitadas con derecho a voz a las sesiones del Consejo General de la CSI. Las organizaciones regionales tendrán base continental, admitiéndose la existencia de estructuras subregionales: algunas más livianas –Mercosur o Región Andina- y otras mucho más fuertes –la CES-. En Europa se va a crear un Consejo Regional Paneuropeo que integrará a la CES y a los sindicatos balcánicos y de los países de la antigua Unión Soviética, sobre la base de las estructuras de la CES.
Destacar la participación de CC.OO. en el Congreso ( día 2 de noviembre, a las 13 horas, en la sala Stolz) de noviembre con la intervención de Joaquín Nieto, secretario confederal de Medio Ambiente y Salud Laboral sobre “ Sindicatos y desarrollo sostenible”.
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