La dirección de Renault ha planteado un fuerte control de los costes salariales, aumentar las medidas de flexibilización y cuestiones como considerar las factorías de Valladolid y Palencia como un único centro de trabajo para ampliar la movilidad entre estas plantas, de manera que el nuevo convenio signifique unas ganancias en productividad para la empresa.
La empresa del rombo hizo ayer su planteamiento general en la Comisión Negociadora del Convenio Colectivo, en el marco del cual dejó patente que su primera responsabilidad es preservar y mejorar el actual nivel de competitividad, por considerar que esto será lo que permita que las factorías puedan verse beneficiadas de nuevos proyectos cuando llegue el momento.
En este contexto, la negociación del nuevo convenio tiene que dar respuesta a los compromisos del 'Renault Contrat 2009' presentado por Carlos Ghosn en febrero de este año, cuyos principales objetivos se fijaron en vender 800.000 coches más en 2009, disparar beneficios y reducir costes de fabricación en un 12 por ciento, de logística en un 9 y de compras en un 14 por ciento.
Así, fuentes de la empresa explicaron a Europa Press que no se podrá llegar a ningún acuerdo que impida conseguir estos objetivos, por lo que el convenio debería tener una duración de tres años, coincidiendo con el fin del contrato y lo que pretende la Dirección es sobre todo ganancias en productividad.
Todo ello comportará un fuerte control en los costes salariales con incrementos salariales inferiores al IPC español. Además, la mejora de la productividad, según la Dirección, aconseja incrementar la parte variable del sueldo en detrimento de la retribución fija, de manera que se ligaría a la consecución de los objetivos.
De la misma forma, se aconseja ligar el cobro de algunos conceptos salariales al absentismo, para mejorar los elevados índices actuales, de manera que se pretende involucrar a la plantilla en la situación que vive Renault.
Otros aspectos que tienen que negociarse son los problemas de movilidad que existen entre Valladolid y Palencia, indicó la empresa, que pretende que se consideren un sólo centro de trabajo, un 'centro único'. La factoría palentina, ubicada en Villamuriel de Cerrato, cuenta con 2.538 trabajadores, mientras que la vallisoletana tiene 6.358, según el último censo electoral.
También se pretende implantar un sistema de promoción 'más moderno' en el que se favorezca la implantación de una gestión por competencias.
Respecto a la flexibilidad, considera 'imprescindible' retocar alguna de las medidas que existen y especialmente para 'rebajar' su coste.
En concreto, la Dirección de la empresa propone una bolsa de horas que para situaciones normales debería oscilar entre más 30 y menos 25 días, cuando actualmente se sitúa en 20 positivos y 25 negativos. La recuperación, además, se tratará mediante compensación por tiempo. Además, para mejorar la flexibilidad la empresa considera necesario reducir los plazos de aviso de aplicación de bolsa a 24 horas sólo para necesidades urgentes y a 48 en situación normal.
Otra de las cuestiones que Renault considera 'aconsejable' es aumentar la posibilidad de trabajo a 24 sábados y domingos por año, y flexibilizar el calendario por líneas en función de los diferentes clientes.
En definitiva, la compañía francesa cree que todo esto va a permitir disponer de un aparato productivo más acorde con las exigencias actuales y dotar a Renault de posibilidades para afrontar el futuro 'con mayor garantía de éxito'.
De esta forma, se esperará a una próxima reunión para puntualizar algunas de estas cuestiones, que en principio son las líneas básicas que propone la empresa para negociar, mientras que la representación de los trabajadores ya ha manifestado su intención de llevar a cabo un plan de bajas incentivadas y algunas otras medidas para reducir el expediente de regulación de empleo, algo que tendrá contestación el viernes.
Por su parte, el sindicato UGT calificó de 'duros' los planteamientos de Renault en la comisión negociadora del convenio, y manifestó que también lo serán los de la plataforma de los trabajadores, que esperan presentarse el próximo martes, 19 de diciembre.
El secretario de Comunicación de UGT en Renault, Alejandro Durán, en una primera valoración tras la exposición de las planteamientos que la empresa hizo ayer, calificó las propuestas de 'duras', afirmó que no les gustan y no las comparten.
Durán afirmó que también en esta línea serán las reivindicaciones y planteamientos de los trabajadores. Así, el representante de UGT explicó que la preocupación es el futuro de las plantas de Renault en España y afirmó que se trabajará para ello y se intentará llegar a acuerdos. Recordó que, en anteriores negociaciones, la Dirección de Renault ha hecho siempre sus peticiones, después los trabajadores han planteado sus reivindicaciones y posteriormente se ha tratado de 'limar asperezas'.
En este contexto, afirmó que sus principales preocupaciones se centran en el plan de bajas incentivadas, el contrato relevo, el plan industrial para el futuro de Renault y negociar, en el marco del convenio, los salarios y jornadas.
Tras la reunión del viernes, en la que la empresa ha anunciado su intención de responder a la propuesta del plan de bajas, el lunes los sindicatos mantendrán un encuentro para elaborar una plataforma 'unificada' de reivindicaciones.
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