Los principales sindicatos italianos decidieron ayer aplazar la huelga convocada para mañana viernes para todos los trabajadores de la compañía aérea, a la espera de los resultados de la reunión que celebrarán con el Gobierno el 1 de febrero.
La formalización de la suspensión de la huelga, que será aplazada a una fecha sin precisar, se produce después de que los sindicatos fueran convocados el martes por el Ejecutivo a una reunión para tratar sobre el desarrollo del proceso de privatización de Alitalia.
La reunión será el 1 de febrero, dos días después de que se cierre el plazo de recepción de ofertas para adquirir una cuota entre 30,1 y el 49,9% del capital que posee el Gobierno en la compañía, primer paso para terminar su privatización, con la que se pretende hacer frente a los problemas económicos de la aerolínea.
El secretario general de Filt-Cgil, Fabrizio Solari, indicó que la decisión de aplazar el paro responde a un sentido de responsabilidad de los sindicatos, que están 'absolutamente interesados en encontrar una solución' a los problemas de Alitalia.
Sin embargo, indicó que persisten los motivos que llevaron a convocar la huelga y señaló que se han añadido 'nuevos elementos de incertidumbre' a la situación.
Solari se refería a la dimisión ayer como miembro del consejo de administración de Alitalia de Jean Cyril Spinetta, número uno de la compañía francesa Air France.
La empresa Air France-Klm considera que Spinetta no puede formar parte del consejo de Alitalia, después de que el Gobierno de Roma haya sacado a concurso las acciones que tiene en la compañía de bandera.
La dimisión ha sido interpretada por los mercados como señal de que Air France-KLM quiere entrar seriamente en el concurso para hacerse con Alitalia, después de que el pasado noviembre ambas confirmaron la existencia de contactos para una eventual alianza, aunque apuntaron que tenían carácter exploratorio y no exclusivo.
Este viernes está convocado un paro de 24 horas de los pilotos de la compañía aérea italiana Meridiana, que protestan por lo que califican de falta orgánica de plantilla y la falta de respuesta de la empresa a sus peticiones.
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