Los trabajadores de la empresa Quesos del Duero, la fábrica quesera que García Baquero tiene en Toro (Zamora) concretarán en las próximas horas las medidas de presión que llevarán a cabo en protesta por las condiciones de trabajo impuestas por la firma manchega.
El secretario de Alimentación de Comisiones Obreras, Andrés González Gato, apuntó ayer que la empresa no está dispuesta a modificar "lo más mínimo" las condiciones laborales de los trabajadores.
Explicó que los empleados tienen un salario bruto de 720 euros mensuales y la empresa se niega a permitir el descanso para el bocadillo.
El sindicato denunció, además, que estas condiciones que se sufren en Zamora no tienen nada que ver con las que tienen los trabajadores de la misma empresa en la fábrica central ubicada en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), lo que supone un "agravio inadmisible", recordó Gato, si se tienen en cuenta las ayudas públicas que la empresa consiguió de la Junta de Castilla y León al instalarse en Zamora.
120 trabajadores se pueden ver afectados por la huelga si prospera la pretensión del sindicato.
En la mañana del miércoles fracasó el último intento de acuerdo entre la empresa y los trabajadores con la mediación del Servicio de Relaciones Laborales (Serla).
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