El papa Benedicto XVI pidió hoy a los empresarios italianos que no ahorren esfuerzos para proteger el empleo, en especial el de los jóvenes, aún cuando el mundo del trabajo esté marcado por la crisis.
Durante una audiencia con jóvenes empresarios de la patronal italiana Confindustria, el Papa reiteró "la importancia de la familia fundada en el matrimonio, como elemento fundamental de la vida y del desarrollo de la sociedad".
Es necesario que la actividad laboral "vuelva a ser el ámbito donde el hombre pueda realizar sus potencialidades, aportando capacidad e ingenio personal, y depende en gran parte de vosotros, empresarios, crear las condiciones más favorables para que suceda", dijo el Papa.
"Todo ello no es fácil, estando el mundo del trabajo marcado por una fuerte y persistente crisis, pero estoy seguro de que no ahorrareis esfuerzos para proteger la ocupación laboral, de manera particular la de los jóvenes", agregó.
Benedicto XVI indico que los jóvenes, para construir su futuro "con confianza" deben poder contar con "una fuente de sustento segura para ellos y sus familias".
El Papa indicó que es "indispensable que la referencia última de toda intervención económica sea el bien común y la satisfacción de las legítimas esperanzas del ser humano".
Benedicto XVI recordó que "la vida humana y sus valores deben ser siempre el principio y el fin de la economía".
Incluso en los momento de mayor crisis, "el criterio que gobierna las elecciones empresariales no puede ser la simple promoción de un mayor beneficio", indicó el Papa, quien recordó que los trabajadores son el "patrimonio más precioso de la empresa".
Además, reiteró "la importancia de la familia fundada en el matrimonio, como elemento fundamental de la vida y del desarrollo de la sociedad".
Por ello, actuar en favor de la familia significa "contribuir a renovar el tejido de la sociedad y asegurar las bases de un auténtico desarrollo económico", indico.
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