Los sindicatos CC.OO.y UGT informaron el viernes de la mala situación en la que se encuentra la negociación del convenio colectivo con la dirección del fabricante de neumáticos Michelin en sus plantas de Valladolid y de Vitoria, e indicaron que, de no llegarse a una solución, podrían convocar una huelga en septiembre.
El secretario general de CC.OO. en Michelin, Bernabé Haro, anunció ayer que el estado de la negociación del convenio va "mal" y resaltó que, si la situación sigue como hasta ahora, planteará días completos de huelga en septiembre.
Haro calificó el estado de las negociaciones de "malo", ya que los objetivos marcados por CC.OO. en este convenio, y "compartidos por todas las fuerzas sindicales de los centros, no han sido escuchadas por la empresa".
CC.OO. solicita mayor estabilidad en el empleo, "lo que implica la conversión de los contratos de duración determinada en indefinidos". Sin embargo, Haro denunció que esta reivindicación está "totalmente bloqueada", ya que "la empresa, tras ocho reuniones de la mesa negociadora, no ha realizado ninguna oferta y se niega a hablar de ello", explicó.
Otra de las reivindicaciones del sindicato es "ganar mayor poder adquisitivo en los salarios". En este sentido, Haro consideró que "es imprescindible tener la cláusula de revisión de garantía salarial, para no estar pendiente de las fluctuaciones del IPC de cada año". "El objetivo es ganar poder en los salarios porque estamos en una situación productiva y de ventas, en la que un año más, la facturación de la empresa en España es la más rentable a nivel mundial", defendió.
Por su parte, el secretario general de la Sección Sindical de UGT en Michelin, José Antonio Fernández, recordó a la dirección de la compañía que "la paciencia tiene un límite" y anunció que, si no se llega a un acuerdo en la negociación del nuevo convenio colectivo, a partir del mes de septiembre habrá movilizaciones.
De este modo se pronunció José Antonio Fernández tras la celebración en Valladolid de una asamblea de afiliados y delegados de la Federación Provincial de Industrias Afines (FIA-UGT) en la que se informó sobre la situación de la negociación del Convenio Colectivo de Michelín del que dependen unos 8.500 empleados de toda España (Valladolid, Aranda de Duero, Vitoria y Lasarte).
Tras lamentar que después de más de ocho reuniones de negociación con la empresa no se haya alcanzado "absolutamente ningún fruto", Fernández recordó que la situación actual de la empresa es buena y sin ninguna crisis por lo que consideró que no hay ningún problema para que la negociación siga los pasos marcados por los sindicatos.
"La paciencia de los representantes sociales de Michelin tiene un límite", insistió Fernández, que tras reconocer la imposibilidad de iniciar ahora medidas de presión por coincidir en el tiempo con el comienzo de las vacaciones estivales, advirtió que si esta situación se prolonga más meses, a partir de septiembre se propondrá al Comité Intercentros el inicio de movilizaciones que, en principio, serían paros parciales.
Dicho esto, el secretario general de la Sección Sindical de UGT en Michelin añadió que los trabajadores estarían dispuestos a emprender cualquier tipo de movilización con el fin de reconducir en convenio que en estos momentos está bloqueado.
Entre los puntos más conflictivos en la negociación de este convenio colectivo se encuentra el "empeño" de la empresa de reducir el tiempo de descanso para tomar el bocadillo de 30 a 20 minutos y la pretensión de la Dirección de Michelin de aumentar la jornada laboral anual pasando de 1.580 horas a 1.600.
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