La inversión industrial en Cataluña creció un 6,7% en 2006, la tasa más elevada de los últimos seis años, según el informe anual sobre la industria presentado hoy por el conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet.
La evolución de la inversión industrial es uno de los indicadores que mejor expresa la confianza de los empresarios en el futuro y la 'solidez' de la recuperación de este sector, ya que contribuye al aumento del PIB y a la mejora de la productividad, en palabras de Huguet, quien ha comparecido en rueda de prensa junto al secretario de Industria y Empresa, Antoni Soy.
El 38,4% de las inversiones se destinaron a ampliar la capacidad productiva, mientras que un 25% se orientó a mejoras en el rendimiento de los equipos productivos y un 20%, a la reposición de maquinaria.
Las pequeñas y medianas empresas -de menos de 50 trabajadores- se comportaron con mayor dinamismo, ya que invirtieron un 13,8% más que en 2005, frente a las grandes compañías -las de más de 250 empleados-, que disminuyeron su inversión un 2,3%.
Las exportaciones catalanas crecieron un 12% en 2006 y las áreas geográficas donde se incrementaron más fueron América Central y del Sur (39,1%), además de América del Norte (20,5%).
En este sentido, Soy ha destacado el crecimiento 'espectacular' de las exportaciones de alto contenido tecnológico, que aumentaron un 25,3% respecto al año anterior.
Por el contrario, el pasado ejercicio se registró una desaceleración en el crecimiento del empleo industrial, con un alza del 0,6%, así como un encarecimiento del 5,1% de los precios industriales -el más alto desde 2000-, motivado en parte por la subida de los precios del petróleo.
También destacó el descenso del 45,6% de la inversión industrial extranjera en Cataluña, que pasó de los 1.231,5 millones de euros de 2005 a los 670,3 millones del pasado ejercicio.
Los materiales de construcción, la electrónica de consumo y la fabricación de motocicletas se erigieron como los sectores con un mejor comportamiento industrial en Cataluña, frente al textil, donde continuó el fuerte ajuste derivado de la adaptación de las empresas a la competencia asiática.
Según Huguet, el empresariado catalán 'está haciendo los deberes' en el cambio de modelo económico a través de la diversificación de sus actividades, la modernización de las estructuras y la internacionalización, y Cataluña 'ha resistido la tentación' de ser sólo una región de servicios.
El conseller ha previsto una 'nueva oleada' de inversión extranjera en Cataluña, en este caso en centros de investigación y desarrollo, en vez de fábricas, y ha prometido ofrecer a las multinacionales 'todas las facilidades' para llevar a cabo estos planes.
Para fomentar estas inversiones, el Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial (CIDEM), dependiente de la Generalitat, prepara una línea de proyectos de investigación similar al programa de Consorcios Estratégicos Nacionales en Investigación Técnica (CENIT) del ministerio de Industria, una reivindicación de compañías como Seat.
Huguet, que no ha querido vincular la incorporación de inmigrantes al mercado laboral con la pérdida de productividad de la economía española, se ha referido al 'problema de fondo' de la Formación Profesional, un 'reto histórico' que hay que afrontar para mejorar la competitividad, ha dicho.
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