La Unión Europea lanzó ayer un nuevo programa de cooperación en materia de asilo e inmigración que dedicará durante los próximos siete años un total de 380 millones de euros a ayudar a los países de origen y de tránsito -tanto en la frontera sur como en el este- a controlar y gestionar los flujos migratorios.
Durante los primeros cuatro años (2007-2010), el programa dispondrá de una asignación de 205 millones de euros que se distribuirán de la siguiente manera: 70 millones de euros para la ruta de inmigración sur (África septentrional y subsahariana); y 50 millones para la ruta del este (Europa del Este, Federación Rusa y Asia Central).
Asimismo, se dedicarán 5 millones de euros a los países de Oriente Medio y del Golfo (países del Este del Mediterráneo partícipes de la política de vecindad, Irán e Irak); 16 millones al sur y este de Asia y región del Pacífico; y otros 16 millones para América Latina y Caribe.
Las ayudas se centrarán además en cinco prioridades horizontales que abordarán distintas dimensiones del fenómeno migratorio y que beneficiarán a todas las regiones: inmigración y desarrollo (10 millones), inmigración laboral (8 millones); asilo y protección de los refugiados (4 millones); tráfico y trata de seres humanos (3 millones); e inmigración ilegal (3 millones).
El programa cuenta también con un presupuesto de 20 millones de euros adicionales para poder reaccionar ante necesidades y situaciones de urgencia relacionadas con la inmigración que surjan en los países que se acojan al mismo.
Tras una evaluación que se realizará en 2009, el programa entrará en su segunda y última fase, en el periodo 2011-2013, con una asignación adicional de 175 millones.
La comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, destacó a través de un comunicado que este programa "es la expresión visible de que la Comisión concede una gran importancia a los problemas de la inmigración y los considera una prioridad en nuestras relaciones y en la cooperación con terceros países".
"Creo que contribuirá a una mejor y más equilibrada gestión de la inmigración en un verdadero espíritu de asociación con otros países, que para nosotros también supone intercambios fructíferos entre nuestros ciudadanos y culturas", añadió.
Por su parte, el vicepresidente del Ejecutivo comunitario y responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini, subrayó que "en este comienzo del siglo XXI, la inmigración y cómo gestionarla en asociación real con terceros países es uno de los desafíos mundiales clave para la UE".
"El nuevo programa de cooperación con terceros países en el ámbito del asilo y la inmigración facilitará a la UE medios tangibles para apoyar y promover un planteamiento general y completo de las políticas de inmigración y asilo", recalcó Frattini.
Este programa sustituye a la iniciativa AENEAS, que estuvo vigente durante el periodo presupuestario anterior con menos fondos, pero que permitió poner en marcha un total de 67 proyectos que se están ejecutando en la actualidad.
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