El servicio de socorrismo y rescate en playas de los Bomberos de Alicante comenzó el sábado por la mañana su huelga a la japonesa, como forma de protestar ante la falta de fondos del Ayuntamiento, que no concedía más de 26.000 euros para cubrir los turnos durante los meses de julio y agosto. Sin embargo, una ronda de conversaciones mantenida durante la tarde del sábado acercó las posturas entre administración y trabajadores, lo que permitía pensar a última hora que la solución al conflicto estaba muy próxima.
Las aproximaciones se realizaron después de que una lancha, con la dotación completa de cinco efectivos (patrón, ayudante, dos buzos y un refuerzo en la embarcación), saliera de la base en la dársena alicantina y recorrió el litoral del término municipal entre las once de la mañana y las cinco y media de la tarde, confirmaron fuentes del servicio. No tuvieron que hacer ninguna actuación, aunque estuvieron presentes sin cobrar por las horas realizadas, puesto que el Consistorio no dispuso de más de 26.000 euros para el servicio.
Fuentes municipales informaron a este diario que desde el área de Recursos Humanos reconocieron que los 26.000 euros para este año no eran una cantidad suficiente para atender correctamente las labores de rescate de los Bomberos.
Los trabajadores reclaman disponer de cinco efectivos para atender la lancha del cuerpo y consideran que destinar la misma cantidad que el año pasado para dos meses es insuficiente. Recuerdan que este gasto extraordinario en el 2006 se produjo con la embarcación averiada durante más de 20 días. Salvo sorpresas de última hora, el acuerdo quedará cerrado hoy, en una reunión que mantendrán responsables de los sindicatos del Consistorio con el nuevo concejal de Recursos Humanos del Ayuntamiento, Juan Seva.
En los arenales alicantinos, Policía Local y Bomberos se reparten las tareas. Los primeros se encargan de vigilar y controlar que las embarcaciones no invadan las zonas de baño y también de que los patinetes no se alejen demasiado de la orilla. Los Bomberos, por su parte, se encargan del rescate en situaciones de ahogamiento o ayuda de barcas en apuros.
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