Trabajadores de la filial argentina del grupo español Telefónica marcharon el jueves hasta las sedes corporativas de la petrolera Repsol YPF, el canal de televisión Telefé y Aerolíneas Argentinas, también de capitales españoles, para exponerles el conflicto salarial con su empleador.
"Optamos por ir hasta las sedes de los grandes clientes de Telefónica para exponerles nuestra situación y la irracionalidad de la empresa", dijo a Efe Juan Carlos Lavagna, un portavoz de la Federación de Obreros y Empleados Telefónicos (Foetra).
Los trabajadores de ese sindicato, en huelga "por tiempo indefinido", también llevaron su protesta ante el edificio corporativo en Buenos Aires de la petrolera brasileña Petrobras, otro cliente de Telefónica de Argentina.
Lavagna dijo que el plan de los manifestantes era dejar "documentación sobre el conflicto" en cada una de las empresas, pero no pudieron concretarlo por la fuerte custodia policial que hizo infranqueable el ingreso a los edificios.
"Cantamos e hicimos pública nuestra denuncia", dijo el portavoz sindical, quien destacó la "actitud irracional" de la empresa al exigir, en medio de una negociación salarial, nuevas condiciones de trabajo.
Telefónica de Argentina instó este miércoles a los trabajadores que cumplen su séptima huelga en los últimos tres meses "a aceptar la propuesta" efectuada por la empresa "en pos de brindar un servicio acorde a las exigencias de los clientes".
Telecom Argentina, firma de capitales franceses, italianos y locales que es la principal competidora de Telefónica de Argentina, ha concedido recientemente un incremento salarial del 16,5% a sus trabajadores.
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