Metro de Madrid afirmó ayer que ha puesto en marcha un dispositivo especial de seguridad para evitar que se produzcan más incidentes relacionados con la huelga de limpiadores del Metro, así como denunciar los actos vandálicos ocasionados por piquetes y controlar que se cumplan los servicios mínimos.
Según datos de la empresa que se encarga del suburbano, desde el día del inicio de la huelga, el 17 de diciembre, hasta ayer, se han registrado 454 incidentes, el 60 por ciento relacionado con el volcado de basuras y la introducción de contenedores del exterior en las instalaciones, y el 20 por ciento actuaciones contra las instalaciones de la red como el vaciado de extintores, el incendio de papeleras, los graffitis, así como amenazas a trabajadores de los servicios mínimos "provocados, al parecer, por huelguistas".
Entre los incidentes más graves, Metro de Madrid destacó que esta semana varios piquetes rociaron los torniquetes de la estación de Tirso de Molina con bolsas de aceite y grasa, que ocasionó la caída de varias personas mientras accedían y salían del suburbano. Las cámaras del Metro recogieron este incidente y la empresa difundió ayer estas imágenes a los medios de comunicación. Precisamente, la presidencia de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, aludió a la existencia de estas imágenes para ilustrar ayer en el Consejo de Gobierno que la huelga alcanza ya "niveles verdaderamente insufribles para los ciudadanos" y justificar así su decisión de rescindir el contrato a las empresas concesionarias de la limpieza del Metro.
Además, Aguirre afirmó que actualmente la Dirección General de Salud Pública, a la vista de las condiciones en las que se encuentran algunas de las estaciones de Metro, está realizando una inspección para determinar si hay peligro para la salud de los madrileños "como consecuencia del volcado de basuras y el esparcimiento de porquería".
A este respecto, Metro de Madrid subrayó a Europa Press que tiene constancia de dichas inspecciones, pero que, de momento, la Dirección de Salud Pública "no le ha trasladado la existencia de ningún foco de posible insalubridad para el usuario del servicio". "Lo que es cierto es que ahora ya se empieza a notar la suciedad que se amontona, los desperdicios y los olores, mientras los primeros días no había mucho", indicó un portavoz.
EL 34% DE LOS TRABAJADORES SECUNDARON AYER LA HUELGA
Sobre la jornada de ayer, la empresa encargada del suburbano cifró en un 34 por ciento el seguimiento de la huelga entre los trabajadores de limpieza, según datos de las empresas hasta el momento concesionarias del servicio, "por lo que se han cumplido los servicios mínimos". No obstante, señaló que los días de Nochebuena y Navidad no se realizaron los servicios mínimos previstos de entre el 50 y el 60 por ciento.
El incumplimiento de estos servicios mínimos, junto a los incidentes fueron las causas alegadas por las empresas concesionarias para enviar al menos 28 cartas de despido a trabajadores huelguistas en los últimos días, según confirmaron Europa Press dos de ellas.Asimismo, Metro resaltó, entre los incidentes más notorios ocurridos ayer, el continuo incendio de papeleras, "que los guardias de seguridad han tenido que sofocar, además de otras actuaciones como el vertido intencionado de suciedad y los piquetes".
Por último, la empresa encargada del suburbano manifestó desconocer cómo y cuándo dejará de prestar servicio las empresas concesionarias de la limpieza del Metro ni quien se encargará de adecentar mientras la red dure la huelga y después de la misma. "Estamos a la espera de que la Consejería de Transportes nos informe de los pasos a seguir. Seguramente tendrán que contratar una empresa de urgencia para retirar los desperdicios", indicaron.
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