Izquierda Unida (IU) propone en su programa electoral elevar las pensiones mínimas a 660 euros, la creación de un Impuesto Sobre las Grandes Fortunas a partir de ingresos superiores a 100.000 euros al año y llevar a cabo una reforma del IRPF para redistribuir la carga fiscal "sobre quienes más ganan". Estas son las medidas más destacadas que la coalición propone en materia económica y fiscal de cara a las elecciones generales del próximo 9 de marzo.
En este sentido, IU apuesta también por reconocer el derecho "subjetivo, universal y exigible por ley a una vivienda digna tras establecer un calendario de aplicación", así como por desarrollar un plan urgente contra la precariedad laboral, basado en la reforma del Estatuto de los Trabajadores, empleo de calidad, estable y a tiempo completo, y la tipificación como delito del incumplimiento sistemático y "flagrante" de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
En el apartado de medidas para la convergencia social con la Unión Europea (UE), propone alcanzar un gasto anual de, al menos, "un punto más del PIB durante la próxima legislatura" y afrontar una Ley de Convergencia Social y Carta de los Derechos Sociales. También aboga por destinar un 2 por ciento del PIB para I+D+i y firmar contratos laborales para los becarios de investigación y por rebajar el IVA del 16 al 7 por ciento y del 7 al 4 por ciento para una lista consensuada de "productos básicos".
La coalición ha dividido su programa en 25 puntos para "trazar una línea roja y verde". A parte de los ya mencionados, IU reclama "ampliar la democracia" a través de una reforma de la Ley Electoral para lograr una ley "justa que garantice la representatividad y proporcionalidad de los resultados electorales". Defiende también un Estado social participativo, con una Ley de Democracia Participativa y el fortalecimiento del movimiento asociativo.
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