El candidato número dos por Madrid del PP, Manuel Pizarro, aseguró hoy que el dato adelantado del IPC correspondiente al mes de febrero (4,4%) es "muy malo". Además, explicó que el hecho de que esta cifra no suponga varación alguna respecto a la inflación del mes de enero es "mucho peor", ya que, en una economía que se desacelera, es lógico que el consumo se retraiga y, por ello, que los precios tiendan a bajar.
Así, consideró, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, que si el IPC no desciende es porque "la situación es peor de lo que se piensa" y porque "hay cuestiones persistentes en la subida de precios".
A continuación, Pizarro aseguró que la inflación debe combatirse "claramente" desde los órganos reguladores, introduciendo mayores dosis de competencia en los mercados. Así, consideró que la Comisión Nacional de la Energía (CNE) debe que luchar, desde esta estrategia, contra la subida de los precios energéticos.
"Si los órganos reguladores están despistados con operaciones de otro tipo, que al Gobierno le vienen bien o mal, no se dedican a lo que tienen que hacer", aseveró.
El candidato popular insistió en la necesidad de vigilar "que no haya prácticas monopolíticas" y de evitar la subida de los precios "que dependen del Gobierno". En este último punto, Pizarro puso el ejemplo de los precios del gas, que, según dijo, subieron un 80% frente al 2% de las tarifas para las familias durante el Gobierno del PP, mientras que en la presente legislatura ascendieron un 60% y la tarifa doméstica un 17%.
En el caso de los precios de la leche, Pizarro achacó la subida a que España no ha "peleado" en Europa mayores márgenes de producción. "Se ha renunciado a los fondos estructurales sin pelear", apostilló.
UN MILLÓN DE NUEVOS PARADOS EN 2008
Por otro lado, Pizarro se refirió a los buenos resultados cosechados por empresas como Telefónica o ACS en 2007, pese a la desaceleración de la economía, y afirmó que "todos los que tienen negocio fuera van bien, y todos los que tienen sólo negocio en España no van bien", como es el caso, dijo, de Colonial o Astroc.
Más vehemente se mostró Pizarro a la hora de hablar de las últimas cifras de paro. "Nadie dice que la economía no crezca, pero lo hace muchísimo menos y sin generar empleo, y cuando en esta situación se crea desempleo, el dato es el peor que puede haber".
Más aún, Pizarro aseguró que el número de parados podría alcanzar el millón en 2008. "Si crecemos al 3,8% y generamos 300.000 desempleados en seis meses, cuando estemos creciendo al 2,4%, como ya se empieza a decir, generaremos el doble, porque creceremos la mitad, y llegaremos a los 500.000 desempleados en un semestre y en un año al millón", aseguró.
"El Gobierno ya sabía en mayo que esto no iba bien, y lo está negando o lo está ocultando. Cualquiera de las dos cosas es mala. Si lo oculta, porque estamos en manos de insensatos y si lo niega porque estamos en manos de mentirosos", aseveró, para añadir a continuación que, por el contrario, "los 300.000 parados más son 300.000 problemas que el equipo del PP se echa al hombro".
EL SUPERÁVIT DE LA SEGURIDAD SOCIAL PELIGRA
En el capítulo de financiación autonómica, Pizarro se mostró de acuerdo con la actual Ley Orgánica de Finaciación de las Comunidades Autónomas (LOFCA), modelo por el que las administraciones autonómicas "negocian cómo se reparten los ingresos de todos los españoles".
Si bien, advirtió también que "si no hay ingresos, porque no hay empleo, porque la economía no va bien o porque no se recauda suficientemente, no hay nada que repartir".
"La gente se cree que aquí hay una hucha, que se le pega un garrotazo y se abre la piñata", añadió antes de precisar que, de acuerdo con la tendencia prevista por el PP, el paro hará necesario hacer uso en 2008 del superávit de la Seguridad Social, de 14.104,69 millones de euros en 2007, el 1,34% del PIB.
Finalmente, preguntado por si cree que se hará cargo de la cartera de Economía y Hacienda, en el caso de ganar el PP las electores, Pizarro se mostró tajante: "Seré lo que quiera el señor Rajoy".
"Serviré a mi país como me toque, como nos pongan los electiores primero y como decida Rajoy después". "Me gustaría compartir un proyecto ilusionista, como me toque, aunque sea llevando el botijo", concluyó.
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