La Federación de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego de la UGT-PV han denunciado ayer que las asociaciones empresariales mantienen una posición "maquiavélica" en la negociación del Convenio Provincial de Hostelería de Valencia y por ese motivo "no avanza".
Según informan fuentes de UGT, lo que se pretende conseguir con la negociación de este convenio es la mejora de las condiciones de trabajo, con la implantación de un salario base mínimo de convenio de 1.000 euros, y que los buenos profesionales estén mejor retribuidos, potenciando una política de igualdad de oportunidades.
En este sentido, denuncian que las asociaciones empresariales mantienen una posición que roza la "paranoia" y el "ridículo" porque dicen "querer buenos profesionales formados y, por la otra, quieren recortar derechos a los profesionales, conseguidos con el consenso de todos".
A su vez, las empresas pretenden una flexibilidad "abusiva", teniendo a su disposición al trabajador durante las 24 horas del día, y que puedan hacer hasta 12 horas diarias, partir los días libres de descanso semanal, y que los festivos trabajados la empresa tenga la opción de compensarlos como le convenga.
Esta postura por parte de UGT es "inadmisible, inoportuna y propia de mentes retrógradas que no tienen ninguna intención de modernizar la hostelería valenciana, sino incrementar todavía más los beneficios a costa del esfuerzo de los trabajadores y trabajadoras del sector".
Si no hay una rectificación por parte de las asociaciones empresariales, y unas propuestas "más sensibles" a la situación real de la hostelería valenciana, UGT ha indicado que no descarta la posibilidad de recurrir a una próxima movilización de los trabajadores y trabajadoras del sector".
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