Carlos Carnicer Díez, presidente del Consejo General de la Abogacía Española, es muy claro a la hora de hablar de la huelga de los funcionarios de Justicia: «Hoy tener un despacho abierto cuesta muchísimo dinero al mes, y ya hay muchos compañeros y compañeras que llevan mes y medio sin poder minutar, sin poder facturar. Algunos tienen problemas económicos graves».
Carlos Carnicer estuvo ayer en Cáceres participando en los actos de la patrona del Colegio de Abogados, y no dudo en comentar que la situación de los abogados está siendo inquietante ante el colapso de la Justicia. Según él, los letrados están muy preocupados ante el enigma de cómo se va a resolver el problema de la huelga. Recalca que es necesario que desarrollen todos los esfuerzos posibles, tanto los sindicatos como el Ministerio de Justicia, para lograr una solución a la huelga a muy cortísimo plazo.
«Habrá unos efectos directos de la huelga que van a ser tremendos. Se habla de que digerir el atasco que se ha creado va a costar más de un año, y estamos hablando de derechos, de derechos fundamentales en muchos casos que se van a afectar. Ya se están resintiendo derechos como el de la libertad: no se están tramitando permisos», advierte.
Carnicer comenta que va a poner a disposición de los sindicatos y del Ministerio, a toda la abogacía española para acercar posturas y encontrar soluciones.
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