El verano puede ser una época perfecta para buscar trabajo y conseguir mejores condiciones laborales. En contra de la creencia popular, las contrataciones en verano son cada vez más frecuentes. La carga laboral desciende y las empresas pueden formar con mayor dedicación a los nuevos empleados, para que en los meses más productivos dominen la metodología de la compañía y sean completamente eficientes.
Por ello, los expertos de la compañía especializada en formación digital Faro Edtech exponen las principales ventajas de buscar trabajo en los meses de verano:
- Más oportunidades laborales. Septiembre y octubre son dos meses con grandes incorporaciones en el mercado laboral. Muchas compañías deciden empezar el nuevo curso con renovación de personal. Para ello, es necesario realizar los procesos de selección en junio. «Además, hay que tener en cuenta que los técnicos de Recursos Humanos también se van de vacaciones y querrán dejar el asunto zanjado, para comenzar el nuevo curso con las nuevas incorporaciones», indica Adrián Álvarez Cañete, coordinador académico de Faro Edtech.
- Menos competencia. Al estar gran parte de la población de vacaciones durante julio y agosto, hay menos competencia en los procesos selectivos y ello favorece que tu perfil sea más visible para los reclutadores, incrementando tus posibilidades de ser entrevistado por la compañía.
- Más tiempo para la formación. El hecho de que en verano los días sean más largos fomenta una mayor predisposición de los candidatos a la formación en determinadas áreas para las que comúnmente no tienen tiempo en el resto del año. Además, los candidatos disponen de más tiempo para mejorar su CV, pueden participar en más procesos selectivos y ensayar sus presentaciones, consiguiendo más confianza y seguridad en sí mismos.
- Acceso a contratos indefinidos. Aunque en verano predominan los contratos temporales de sustitución, hay que tener en cuenta que un contrato con duración determinada puede ser una gran oportunidad para demostrar las habilidades y el interés en el puesto, y conseguir una nueva vacante unos meses después, cuando la empresa necesite contratar a alguien de forma indefinida.
Cómo enfrentarse a una entrevista de trabajo
El mensaje que transmitimos a los reclutadores en una entrevista de trabajo es tan importante como la manera que tenemos de comunicarnos. Así, desde Faro Edtech también comparten estos consejos sobre cómo influye el lenguaje corporal en una entrevista de trabajo presencial u online:
- Mantén contacto visual. Cuando hablas con alguien, el contacto visual puede demostrar confianza, interés y sinceridad. En una entrevista, procura mantener durante unos segundos el contacto visual, no mires hacia los lados ni hacia arriba.
- Sonríe. La sonrisa expresa amabilidad y felicidad, y además permite conectar con la persona con la que hablamos. Por ello es aconsejable sonreír de una forma natural al saludar y al despedirnos del entrevistador.
- Usa gestos adecuados. Utilizar gestos para enfatizar tus puntos clave y demostrar confianza también es recomendable en una entrevista de trabajo. Intenta evitar gestos nerviosos como mover las piernas o morderte el labio.
- Presta atención a tus manos. Las manos son una parte fundamental de la comunicación no verbal y son reflejo de tus emociones. Procura mantener las manos en la mesa o en el regazo de forma natural, no cruces tus brazos ni te toques de forma excesiva la cara o el pelo.