La pandemia tuvo un impacto sin precedentes en la industria de los eventos. Junto a la cancelación de encuentros, la obligada digitalización a la que tuvieron que hacer frente las empresas hicieron aumentar la popularidad de otros formatos. Es por esto que, pese a la vuelta de la presencialidad, los eventos digitales y/o híbridos siguen siendo una opción válida para muchas compañías, tal y como revelan desde la agencia global de marketing y engagement MCI Spain & Portugal. Hoy en día no es cuestión de presencialidad o digital, sino la posibilidad de poder elegir según los objetivos de la empresa y el evento.
“Después de tres años donde todo lo relacionado con la industria se llevó a cabo de forma remota, no dejamos de leer noticias sobre la vuelta del turismo y los eventos presenciales, y ¡esto es la realidad! El evento presencial sigue siendo la mejor manera de conectar al público y aumentar el engagement. Sin embargo, hay empresas que adicionalmente al presencial han descubierto que el evento hibrido y/o digital también responde a unas necesidades y tiene ventajas frente al evento presencial”, explica el director general adjunto de MCI Spain & Portugal, Rudolf Rannegger.
Combinar las virtudes de la presencialidad y lo digital ha dado grandes resultados. Y es que, tal y como recoge un estudio desarrollado por el software de gestión de eventos Bizzabo, si bien el 80,2% de los organizadores de eventos reconocen haber podido llegar a un público más amplio gracias al formato digital, 9 de cada 10 usuarios (87%) estaban deseando retomar el cara a cara, al considerarlo esencial para construir mejores relaciones de trabajo.
Más digital, más sostenible
Las empresas se enfrentan a una mayor presión cuando se trata de temas de sostenibilidad, especialmente en los eventos. Por lo cual, el evento digital y/o híbrido sigue siendo una opción atractiva para muchos.
“El evento digital y/o hibrido se ha establecido como una nueva categoría dentro de la gama del evento. Ya no se considera un sustituto temporal a lo presencial,” destaca Rannegger, y añade, “hemos visto que los eventos digitales y/o híbridos permiten llegar a un público más amplio, cuentan con mayor accesibilidad, aumentan la sostenibilidad, reducen los gastos y permiten obtener datos más detallados de los asistentes”.
Entre las ventajas que han supuesto este tipo de encuentros destacan los casos de los eventos internos, donde los directivos a nivel global se comunican frecuentemente vía ‘Town Halls’ digitales o híbridos a nivel nacional o internacional. Así como aquellas compañías multinacionales con equipos de miles de talentos descentralizado, donde el formato digital o híbrido es el mejor para conectarse y comunicar nuevas estrategias o lanzamientos internos.
“Lo mejor del ecosistema actual es la cantidad de alternativas: si una empresa tiene claro que el propósito de su evento es el contenido, optará por el formato digital; si se quiere enfocar en el networking y el engagement, se decantará por un encuentro presencial; mientras que si busca un equilibro sostenible le quedará la opción de hacer un mix bajo el formato híbrido”, añade el experto.
“En MCI creemos esencial la evolución de los eventos y que no vuelvan al mismo formato de prepandemia,” concluye Rudolf, “La flexibilidad y el establecimiento de objetivos claros son fundamentales para saber qué formato de evento se adapta mejor al publico y ayuda a trasmitir el mensaje adecuado”.