Si nos paramos a pensar a qué le damos valor los seres humanos, siempre aparece la palabra salud. A medida que se ha avanzado en la investigación médica, en la comprensión de los determinantes de la salud y en la promoción de enfoques más holísticos, se ha reconocido que la salud no se limita únicamente al aspecto físico o a la ausencia de la enfermedad. Por eso, hoy hablamos de que la salud es transversal.
Y actualmente la entendemos de este modo porque la salud no se limita únicamente al aspecto físico, sino que también incluye el bienestar mental, emocional y social de una persona. Estas dimensiones están estrechamente relacionadas y se influyen mutuamente.
Por eso, desde las empresas, si se quiere cuidar de la salud de los colaboradores, ya quedó anticuada la fórmula de atender únicamente a la prevención de riesgos laborales o proporcionar un bono para ir al gimnasio. Ahora, tener un enfoque preventivo real y proporcionar las herramientas para que los equipos sean más saludables y tengan un mayor bienestar, es atenderles con una visión 360.
WellWo, bienestar laboral, tenían esta visión desde su nacimiento y, por esta razón, promueven hábitos de vida saludables en seis pilares: la salud física, la emocional, la nutricional, la financiera, la social y, también, la medioambiental como solución corporativa para apoyar al departamento de RSC (Responsabilidad social corporativa).
Salud física
La salud física se refiere al funcionamiento adecuado del cuerpo. Implica mantener una alimentación equilibrada, realizar actividad física regular, descansar lo suficiente y realizar chequeos médicos periódicos. Cuidar el cuerpo es fundamental para prevenir enfermedades, fortalecer el sistema inmunológico y mantener un estado de bienestar general.
Salud emocional
La salud mental es igualmente importante. Incluye aspectos como el equilibrio emocional, la gestión del estrés, la capacidad de afrontar los desafíos de la vida y mantener relaciones saludables. Es fundamental cuidar nuestra salud mental a través de prácticas como la meditación, el manejo adecuado de emociones, el descanso mental, buscar apoyo y expresar nuestras emociones de manera saludable.
Salud nutricional
Una dieta equilibrada y nutritiva es fundamental para mantener una buena salud física. La alimentación también tiene un impacto en la salud emocional, en la energía y el rendimiento. Además, juega un papel crucial en la salud digestiva.
Salud medioambiental
El entorno en el que vivimos también influye en nuestra salud. El acceso a un ambiente limpio y seguro, la calidad del aire y del agua, y la preservación de los recursos naturales son aspectos fundamentales para mantener una buena salud. Cuidar el medio ambiente no solo beneficia a nivel individual, sino que también tiene un impacto positivo en la salud colectiva.
Salud social
Las relaciones interpersonales saludables, el apoyo social y la participación en comunidades pueden tener un impacto significativo en nuestro bienestar. Mantener conexiones significativas, tener una red de apoyo y participar en actividades comunitarias son elementos esenciales para cuidar nuestra salud social.
Salud financiera
Las finanzas personales tienen un impacto significativo en el bienestar general de una persona. El estrés y la ansiedad relacionados con los problemas financieros pueden afectar negativamente la salud mental y emocional. Por eso es importante, ofrecer las herramientas e información, para manejar las finanzas y relacionarnos con el dinero de una forma sana.
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