En la actualidad, la eficiencia energética es un tema clave en el sector inmobiliario, ya que los edificios son responsables de más del 40% del consumo mundial de energía y del 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero. En este contexto, la digitalización de los parques inmobiliarios se ha convertido en una solución cada vez más popular para mejorar la eficiencia energética de los edificios. Según datos proporcionados por CBRE en un estudio, apostar por un edificio smart building (que incorpora la última tecnología con el fin de optimizar los recursos), mejora un 15% su eficiencia energética. Además, también es positivo a nivel económico para las empresas que usan instalaciones inteligentes pensando en el medioambiente ya que reduce un 25% las incidencias laborales y un 5% el nivel de absentismo, mejorando el clima laboral internamente en la compañía y atrayendo capital inversor.
De esta forma, gracias al uso de tecnologías digitales, como sensores, sistemas de control y monitorización, las empresas pueden medir y controlar el uso de energía en tiempo real, identificar patrones y áreas de mejora, y tomar medidas para reducir el consumo de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero. En este sentido, Deepki, compañía de datos ESG, detalla 3 tipos de herramientas útiles para que se tenga el control automático y remoto de los edificios:
- Modelado de información de construcción a través de la llamada arquitectura BIM: se trata de una metodología de diseño que utiliza modelos digitales 3D para crear edificios nuevos y renovaciones importantes. Esta herramienta permite a los arquitectos visualizar la estructura y los componentes físicos y funcionales del edificio antes de construir una nueva parte del edificio para renovarlo, o directamente antes de construirlo, con el objetivo de evitar errores que comprometan el rendimiento energético en el futuro del edificio. Además, ofrece otros muchos beneficios como facilitar la gestión de la propiedad y el mantenimiento del edificio. En España existen edificios BIM muy emblemáticos como el Wanda Metropolitano o el Campus de las Ciencias de la Salud de la Universidad de Barcelona.
- Software relacionado con Internet de las cosas (IoT): la digitalización de los bienes inmuebles también abarca las numerosas aplicaciones de software ahora disponibles para respaldar la gestión técnica (BMS) y el mantenimiento (CMMS) de los edificios. Estas herramientas computarizadas están estrechamente vinculadas al Internet de las cosas (IoT), con sensores inteligentes que brindan una gran cantidad de información sobre los equipos conectados. Como ejemplo, un sistema BMS puede ayudar a la optimización de la iluminación del espacio en función del número de personas que lo ocupen. Además, puede proporcionar información detallada del consumo real, por lo que los datos extraídos ayudan a generar estrategias que aporten al ahorro de las facturas de la luz.
- Herramienta de evaluación y monitorización de la gestión energética: para que la digitalización de los edificios sea exitosa se necesita que todos los datos disponibles estén accesibles y conectados, incluso si están en diferentes formatos nativos. De esta forma, se puede saber si un edificio está usando o no demasiada energía. Para una evaluación eficaz, es necesario el contexto informativo. Herramientas como las de Deepki, cruzan datos del edificio (superficie, ubicación, año de construcción) y de su actividad (tasa de ocupación, horario de apertura, equipamiento en obra, etc.). Al juntar todos estos parámetros, crea un análisis real del consumo del edificio y determina si es “normal” o no, así como qué posibles mejoras se pueden introducir en los edificios para llegar al nivel óptimo.