Los directivos muestran su preocupación ante la falta de liderazgo de los mandos intermedios. Esta es una de las principales conclusiones que ha arrojado el informe elaborado por la consultora en RRHH Equipo Humano, “es preocupante observar cómo los mandos intermedios se centran en ejecutar su trabajo y carecen de formación para realizar una gestión eficaz de los equipos”. Hay que señalar que en la elaboración del informe han participado más de 200 directivos de diferentes empresas.
El informe destaca la opinión unánime de los directivos a la hora de describir el perfil de los mandos intermedios, “profesionales que han llegado a este puesto porque desempeñaban sus puestos de trabajo de forma excelente pero que carecen de experiencia en la gestión de las personas. Por ello, es urgente que se formen en competencias muy concretas como la comunicación no violenta, la empatía y asertividad a la hora de dar instrucciones, en la mejora de la planificación en las reuniones, así como en el acompañamiento a las personas para su desarrollo dentro de la empresa”.
La figura del mando intermedio es clave en una empresa como eslabón de unión entre el equipo directivo y sus trabajadores. En este sentido, la persona que ocupa este puesto “debe tener una perspectiva global del modelo de negocio, del cliente, del producto y de los procesos generales de la compañía además de habilidades para gestionar de forma efectiva a los equipos”, afirma José Enrique García, CEO de Equipo Humano.
Explica García que uno de los problemas es que los mandos intermedios suelen encontrarse en una posición ambigua y poco definida. “Por un lado, tienen que actuar como representantes de la alta dirección, transmitiendo sus decisiones y políticas a los trabajadores de base. Por otro lado, también tienen que actuar como lideres de equipo, motivando y guiando a los trabajadores para que cumplan sus objetivos y metas”.
En este sentido, señala García que esta posición ambigua puede generar confusiones, especialmente si no se cuenta con las habilidades y competencias necesarias para desarrollar ambos roles de manera adecuada, “les falta de formación en habilidades y competencias para desarrollar la gestión de los equipos de manera efectiva”. En este sentido, García apunta que los mandos intermedios deben poseer una variedad de habilidades entre las que destaca la comunicación, la motivación, el liderazgo, la evaluación y retroalimentación, organización, flexibilidad y adaptabilidad”
En general, los mandos intermedios deben ser líderes eficaces y capaces de manejar una variedad de tareas y responsabilidades para garantizar que sus equipos estén motivados, trabajen juntos de manera efectiva y logren los objetivos de la organización. García enumera entre las habilidades clave que deben poseer la capacidad para guiar y motivar a sus equipos para lograr objetivos comunes y de transmitir información clara a los trabajadores; así como habilidades de organización y de negociación.
En opinión de García para abordar esta delicada situación, las empresas pueden implementar programas de capacitación y desarrollo para mejorar las habilidades de los mandos intermedios. Esto puede incluir cursos de liderazgo, capacitación en comunicación efectiva y gestión de equipos, y oportunidades para adquirir habilidades técnicas relevantes. Además, los directivos pueden establecer metas y objetivos claros para los mandos intermedios, y proporcionar retroalimentación y apoyo regular para ayudar a los mandos intermedios a mejorar su desempeño.