Ante la incertidumbre económica actual, LinkedIn, la red social profesional más grande del mundo, ha realizado un estudio para analizar el impacto de esta situación en las empresas españolas. Este demuestra la preocupación de los líderes empresariales por que los avances hechos en términos de trabajo flexible (64%), desarrollo de habilidades (79%) y bienestar de los empleados (77%) durante la pandemia se frenen con el objetivo de reducir costes.
Los líderes empresariales españoles afirman que, ante las turbulencias que se avecinan, sus prioridades han cambiado y ahora necesitan prepararse financieramente (46%), buscar formas para reducir el consumo energético del lugar de trabajo (40%), proporcionar ayuda para que los equipos en remoto trabajen de forma productiva (38%) y mejorar la retención de los empleados actuales (34%).
Así, estos se han visto empujados a redefinir sus políticas laborales y plantearse, entre otras posibles medidas, pedir a sus empleados que trabajen más desde casa (40%), disminuir los esfuerzos en materia de sostenibilidad (30%) o recortar el presupuesto destinado a las oportunidades de aprendizaje y desarrollo de los empleados (26%).
Según señala Ángel Sáenz de Cenzano, director general de LinkedIn España y Portugal, «desde luego no es momento de retroceder y deshacer los progresos alcanzados en materia de flexibilidad y bienestar del empleado. La coyuntura económica a la que nos enfrentamos hará que nos volvamos a adaptar a una realidad distinta, pero no debemos volver atrás. Debemos seguir trabajando en generar empresas diversas y ágiles, con decidida prioridad en invertir en el talento y desarrollo de capacidades para ser más productivos y competitivos”.
De la misma manera, LinkedIn ha comprobado que los líderes reconocen ser conscientes de la preocupación de los empleados por el incremento de los costes de vida (52%) y la posibilidad de ser despedido (40%). Por eso, consideran que tienen que reforzar el compromiso con su equipo para ser más productivos y alcanzar los resultados deseados. Para ello, mantener a los profesionales motivados y comprometidos durante los próximos seis meses es fundamental, así como ofrecerles la oportunidad de desempeñar diferentes funciones dentro de la empresa.
Navegando a través de la incertidumbre
Según LinkedIn, la empatía (38%) y la comunicación (33%) son las claves para que las empresas afronten el reto económico que se presenta. De hecho, estas son las principales soft skills que los líderes identifican para hacer frente a esta situación, seguidas de la resolución de problemas (28%), la transparencia (28%), la inteligencia emocional (24%) y la capacidad de adaptación (23%), entre otras. Por eso, es esencial que los líderes tengan en cuenta a sus equipos en la toma de decisiones y construyan una cultura de alta confianza para hacer frente a los desafíos del futuro.
En este sentido, la red social profesional aconseja a quienes ocupan los cargos de más alta responsabilidad y liderazgo:
- Adoptar un liderazgo innovador: los directivos deben ser transparentes sobre la realidad actual y adaptarse a ella, al tiempo que proporcionar a los empleados claridad respecto a las decisiones futuras de la compañía.
- Mantener la conexión y la confianza en la plantilla: en la actualidad, el 40% de los empresarios fomentan la colaboración y el intercambio de conocimientos entre los empleados, lo que ayuda a dinamizar sus equipos y reforzar la cultura empresarial.
- Poner foco en las habilidades: en España la lista de las habilidades más demandadas ha cambiado alrededor de un 29% desde 2015 y se espera que este porcentaje se duplique para 2027. Al entender las habilidades que tienen sus empleados hoy, y las habilidades que la empresa necesita en el futuro, se podrá contratar o redistribuir el talento en áreas de crecimiento.