Un cambio de empleo es siempre ilusionante. Sin embargo, la incorporación a una nueva empresa no siempre es sencilla, ni exitosa. “Durante los seis primeros meses, además de desarrollar con la mayor eficacia la labor para la que ha sido contratado, el nuevo empleado deberá ocuparse de comprender el funcionamiento de la empresa y establecer nuevas relaciones”, afirma Alana Rincón, directora de Digital&People de Nexian. Es importante darse un periodo de tiempo razonable para tener una idea objetiva de cambiar de empresa si ha sido un error”, añade.
A partir de este plazo de tiempo, el trabajador ya tiene una certeza sobre si el cambio ha respondido, o no, a sus expectativas. Sea cual sea esta opinión, la experta en recursos humanos de la compañía Nexian recomienda “no tenerle miedo al fracaso, ni antes ni después del cambio. La toma de decisiones trae consigo consecuencias, nuevas oportunidades y realidades. En lugar de arrepentirse, el objetivo debe ser elaborar un plan de acción que nos ayude a hacer mucho más fácil esta transición o un nuevo cambio”, añade Rincón.
La opción más elegida ante un cambio de empleo fallido
Volver a sentirse en casa en un nuevo trabajo no es sencillo a pesar del interés tanto de la empresa como del profesional. Además, y según los datos de la propia compañía de RRHH Nexian, en la mayor parte de los casos, las cuestiones que llevan a estos profesionales a considerar el cambio como un error no es la falta de habilidades técnicas, sino la falta de habilidades soft o de acoplamiento dentro del engranaje de la empresa.
Llegados a este punto, Nexian ha querido dedicar su Barómetro del mercado laboral del mes de septiembre a conocer cuál es la salida más frecuente a este tipo de situaciones. Y estos han sido los resultados:
El 66,67% de los encuestados comenzaría una nueva búsqueda: Una vez asumido que el cambio no ha sido lo esperado, estos candidatos optarían por volver al punto de partida y buscar una nueva oportunidad laboral más exitosa.
“Concluir un proyecto sin éxito debe formar parte de nuestro proceso de aprendizaje y desarrollo profesional” asegura Rincón. No es momento de lamentarse, o de pensar en lo que podría haber sido y no fue, sino de descubrir nuestros puntos fuertes y débiles, y utilizarlos a nuestro favor a la hora de desarrollar una trayectoria profesional satisfactoria en otras empresas.
El 18,22% de los participantes darían una nueva oportunidad al puesto: Puede que, inicialmente, las expectativas no se vean satisfechas por alguna de las dos partes, pero, en ocasiones, el tiempo acaba poniendo cada cosa en su sitio.
Darse unas semanas, e incluso algunos meses, de margen puede ayudarnos a integrarnos en la rutina, equipos y engranaje de la compañía. “Es normal que un candidato se sienta fuera de lugar, poco informado o perdido en sus primeros días en la empresa, pero debe darse a sí mismo, y a la empresa, un tiempo razonable para amoldarse” añade.
El 12,88% trasladaría sus impresiones a su responsable: la mayor parte de las diferencias tras estrenar nueva etapa laboral provienen de expectativas no satisfechas. Por eso, comentar las primeras impresiones con el responsable puede ayudar a acercar posturas y a reconducir favorablemente la situación. “Una actitud sincera y transparente será provechosa para el candidato, que podría ver resuelta su incomodidad, y también para la empresa, que le ayudará a reconducir a un candidato que, de otro modo, perdería en poco tiempo”, ha apuntado la directora de Digital&People.
Por último, el 2,23% de los consultados trataría de reincorporarse a su empresa anterior: Estos profesionales se conocen como “empleados bumerán”, haciendo referencia a que se alejaron de la compañía en el pasado, pero ahora regresan buscando una segunda oportunidad. Es una práctica que dista de ser habitual, pero “la tendencia apunta a que cada vez se hacen más recontrataciones,” concluye.
El onboarding, la herramienta para integrar al nuevo talento en las organizaciones:
“Un alto porcentaje de las renuncias o abandonos que se producen durante los primeros meses de un trabajador en el puesto de trabajo podrían evitarse con un periodo de onboarding adaptado al puesto y a la persona”, afirma la experta de Nexian, pues los procesos de presentación, formación inicial y acompañamiento durante los primeros días son clave para que el empleado recién llegado se sienta valorado e integrado, asegurando al máximo la inversión realizada en selección del personal.
Con el objetivo de que todas estas cuestiones que tanto afectan al mercado laboral español sean conocidas, Nexian impulsa desde hace cerca de dos años sus barómetros mensuales, una herramienta destinada a analizar y conocer el pulso del sector de los RRHH, publicando periódicamente los resultados relacionados con sus áreas principales de acción, trabajo temporal, formación, consultoría y selección.
Este histórico de Barómetros elaborados por la compañía están a disposición de quien los desee en el área web, Tu Espacio Tu Espacio Nexian, en el que hace públicos los cuestionarios que le permitirán elaborar estos informes especializados y sus resultados.
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