El órgano comunitario ha vuelto a rebajar las expectativas de crecimiento de España para 2023 después de ajustes a principios de año y en primavera. También vuelve a elevar la inflación media de nuestro país hasta el 8,1% derivada de los efectos de la guerra y por la continua subida de los precios de las materias primas en el último año y los cuellos de botella en la cadena de suministro.
Aun así, España sigue creciendo por encima de la media de la Unión Europea y de la eurozona. Aunque hay un informe del BBVA en el que también se alerta de una breve recesión (menos del 0,5%) en el último trimestre del 2022 y el primero del 2023. Esta situación en la que se unen tantos datos desfavorables puede ser una piedra en el camino para las empresas.
Con todos estos datos, Expense Reduction Analysts (ERA), consultora especializada en la optimización de costes y la gestión de proveedores, quiere dar unos consejos para que las empresas puedan hacer frente a los duros meses que se avecinan para la segunda mitad de año:
Analizar las fuentes de ingresos y gastos: examina meticulosamente qué clientes son los que más y menos dinero repercuten a tus cuentas, si solo los ingresos han aumentado o también los gastos, cuál ha sido el período de mayor facturación, etc. Todos estos ingredientes permiten elaborar informes con detalle y tener esta información organizada en un documento para poder elaborar un plan de acción con mayor precisión y tomar decisiones más eficientes.
ERA asegura que por cada millón de gastos en compras puedes ahorrar entre 100.000 y 150.000 euros al año, una cifra nada desdeñable que puede ayudarte a mejorar el balance de tus cuentas y conseguir ahorrar, incluso en estos tiempos en los que la inflación marca récords históricos. Para ello hace falta una revisión e implementación de mejores condiciones en determinadas partidas de gasto para poder conseguir ese ahorro.
Asegurar liquidez: para las empresas va a ser esencial el poder asegurar los pagos y tener un colchón de dinero listo para cualquier imprevisto, ya que hemos visto que la situación puede cambiar muy rápidamente. Otros fenómenos económicos como la paridad del euro con el dólar o la inflación van a repercutir en las arcas de muchas compañías. Para conseguir esta liquidez, las empresas deben de pasar primero por el paso anterior y conseguir el ahorro que necesitan.
Fortalecer la cadena de suministro: en los próximos meses la falta de materias primas continuará especialmente las energéticas, y habrá una recesión en muchos países de nuestro entorno por los efectos de la guerra y la subida de precios, las empresas tienen que tener una cadena de suministro que no les vaya a fallar en los próximos meses.
El final de año, con fechas como el Black Friday o Navidad, en donde muchas empresas aumentan sus ventas, son muy importantes para sobrevivir y balancear sus cuentas un año más. Es por ello que una cadena de suministro fiable nos ayudará a no quedarnos sin poder producir ni dejar a nuestros clientes sin sus productos.
Este punto está muy relacionado con los proveedores, ya que son ellos los que nos suministran las materias primas, las llevan a los lugares que necesitamos, etc. Por lo que mantener una buena relación con ellos y contratar a los que más se ajusten a nuestras necesidades, es primordial para conseguir una cadena de suministro fuerte y fiable.
“Las previsiones de crecimiento y alza de precios siguen dificultando la labor de muchas empresas para poder subsistir y ofrecer sus servicios sin perjudicar a los consumidores” comenta Fernando Vázquez, socio consultor y co-area developer en Expense Reduction Analysts. “Por nuestra parte seguiremos ayudando a las empresas a reducir sus gastos que les ayudarán a tener más margen para maniobrar pese a la inflación y a las previsiones de crecimiento a la baja.”
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