A medida que se acercan las fechas programadas de las vacaciones comienzan las inquietudes y los nervios para dejarlo todo bajo control. Esta sensación de nerviosismo es muy común entre los trabajadores y trabajadoras que se preparan para comenzar su período de descanso, pues a pesar de organizar todo el trabajo antes de las vacaciones, es inevitable que surjan las dudas de sí cuando vuelva estará todo como lo han dejado o si habrá algún cambio en la empresa o entre el equipo.
Más aún, en puestos de trabajo donde la responsabilidad es mayor, es más difícil desconectar porque brotan los pensamientos recurrentes sobre si estará todo correcto, si necesitarán ayuda, cómo estará yendo la empresa o incluso qué estará pasando en el trabajo. Si estos pensamientos son constantes y no permiten al trabajador o trabajadora desconectar y descansar, probablemente estamos ante el conocido síndrome de estrés vacacional. Este consiste en tener dificultades para adaptarse al período de descanso al llevar un ritmo de trabajo muy acelerado durante el año, y no saber cómo modificar o cambiar a un ritmo más pausado al irse de vacaciones.
El lugar de trabajo es donde pasamos la mayor parte del tiempo a lo largo de nuestra vida, es por ello que, en el mundo laboral, es imprescindible saber cómo organizar las tareas, pero también es importante focalizar la mente en el descanso y no en el trabajo para que haya un correcto descanso.
Para disfrutar de unas merecidas vacaciones y poder desconectar y descansar, tendremos que no preocuparnos por lo que estará pasando en el trabajo. Y para lograrlo, necesitamos dejar las tareas y todos los asuntos hechos.
Pautas para organizar el trabajo antes de las vacaciones
Antes de marcharnos a las vacaciones programadas, proponernos seguir un orden para realizar todas las tareas es el primer paso para conseguir una buena organización que nos permita disfrutar del descanso sin preocupaciones.
Otra pauta que nos ayudará a desconectar mejor para descansar al máximo en las vacaciones es la actitud de anticipar el trabajo. Es decir, comenzar por tareas más urgentes, correos pendientes que contestar o problemas que solucionar dentro del ámbito laboral, así como errores que se hayan cometido. Por otro lado, dejar ordenada la mesa de trabajo, limpiando y reorganizando el espacio: carpetas, materiales, papeles y documentos mejorará la eficacia y dará un ejemplo de orden y limpieza en la empresa.
Definir límites ayuda a priorizar las tareas que son de carácter más urgente, esto nos ayudará a determinar que es esencial terminar primero antes de salir de vacaciones, e ir cerrando proyectos sin dejar ninguna tarea pendiente de feedback. Esto es una forma también de ayudar al resto de compañeros a establecer las prioridades.
Algunas veces, en un equipo laboral, cuando una persona se va de vacaciones, puede delegar su trabajo en otro compañero que sea miembro del grupo y tenga la misma carga laboral o un puesto similar al suyo, por lo que es importante explicar las tareas de forma detallada y secuenciada paso a paso para que la otra persona que va a recibir el relevo pueda realizarla de forma correcta y sin contratiempos. Esto es un gesto de empatía por parte de la persona que se va de vacaciones y también es beneficioso para ambos trabajadores porque así evitas llamadas de trabajo urgentes, y la otra persona puede solventar los problemas de forma autosuficiente.
Según el tipo de trabajo o el puesto laboral en el que nos encontremos, las responsabilidades varían de una forma u otra. Si te encuentras en un puesto de mucha responsabilidad bajo tus hombros, es importante no concertar muchas reuniones, porque esto te llevará a aumentar la carga de trabajo y puede suponer un agobio mayor antes de partir de vacaciones por lo que no se trata de abarcar mucho si no de abarcar lo justo y necesario para que el descanso sea pleno.
Cuando se trata de organizar los quehaceres en el puesto laboral, no todas las personas funcionan de la misma forma, por lo que existen trabajadores que les funciona guiarse creando listas de todo lo que queda pendiente. Dichas listas son creadas de forma manual e ir tachando a medida que se van logrando los objetivos. Aunque las listas mentales son de gran ayuda también, las listas creadas en papel y bolígrafo sirven de una mejor forma a anticipar y planificar más eficazmente.
Para tener un buen descanso, pensar en la futura vuelta al trabajo nos ayudará en el presente para tener una incorporación más agradable. Poniéndonos una carga de trabajo mayor previamente al período de vacaciones nos asegurará una la vuelta al trabajo más fácil al dejar tareas sencillas para la reincorporación a la jornada laboral. Esto tiene un efecto positivo a corto y mediano plazo, ya que si pensamos que al regresar las tareas no serán tan complejas se nos facilita la vuelta al puesto de trabajo.
Por último, otro ejemplo de cómo organizar el trabajo antes de salir de vacaciones es concretar una reunión con los compañeros de equipo laboral para que puedan ponerse al día con los nuevos temas o proyectos que han sucedido durante tu ausencia.
Consecuencias psicológicas de organizar tu trabajo antes de salir de vacaciones
Son varias las consecuencias psicológicas que surgen tras organizar de forma correcta el trabajo, como por ejemplo, comenzar a realizar tareas por placer y no porque tengas que hacerlas debido a la disponibilidad de tiempo y el aumento de la energía. Entre otras consecuencias psicológicas se encuentran los beneficios de desconectar que esto implica reducir el estrés, recuperar rutinas de horarios de alimentación, mejorar la calidad de tomar de decisiones y aumentar la productividad.
El período de vacaciones consiste en olvidar y desconectar de la vida laboral para recargar fuerzas. No utilices este tiempo para organizarte asuntos que tengan relación con el trabajo si no para centrarte en la vida personal. Esto te traerá consecuencias positivas como reducir los niveles de estrés y ansiedad.
En la reincorporación a la jornada laboral, será de agradecer haber cumplido estas pautas previas sobre cómo organizar el trabajo antes de comenzar el periodo vacacional, porque te ayudarán a que la vuelta sea más llevadera y te beneficiarán al volver de forma gradual a la rutina.
Regresar al puesto de trabajo tras un período corto o largo de descanso es algo que hay que tomárselo con calma. En este caso lo ideal es proponerse objetivos a corto plazo hasta conseguir adaptarse de nuevo al ritmo normal de trabajo.
Una vez que has seguido todas estas pautas y has dejado todos los asuntos laborales terminados y organizados toca respirar hondo, sonreír y empezar a imaginar qué harás en tu periodo vacacional. Disfruta de estos días, a fin de cuentas, te lo has ganado.
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