Con la pandemia en su fase final, la vuelta a las oficinas es una realidad. Sin embargo, el trabajo en formato híbrido ha llegado para quedarse. Según un reciente informe de Microsoft, el 73% de los empleados quieren opciones de trabajo remoto y el 67% quieren más tiempo en persona en la oficina. Es una dicotomía que supone todo un reto difícil de gestionar para las empresas.
Actualmente, las compañías con gran cantidad de empleados están viendo cómo necesitan nuevas fórmulas de gestión del espacio. El popurrí de variables que afectan a que se produzca un “overbooking” en la oficina o esta parezca un desierto, son muchas: horarios flexibles, trabajo remoto, trabajo presencial, bajas, etc. Lo mismo pasa con el transporte. ¿Entonces, cómo logramos que empresas con transportes corporativos de 500-2000 trabajadores lleguen a la oficina sin problemas, cuándo esta cantidad varía a diario?
Mantener servicios de transporte corporativo en un contexto de trabajo híbrido puede convertirse en un dolor de cabeza, y de bolsillo, si no se gestiona correctamente. Sin embargo, eliminarlo no es una opción; sigue siendo uno de los principales atractivos para los trabajadores, que más que nunca, necesitan soluciones de transporte alternativas al vehículo privado. ¿Entonces, es viable tener un servicio de transporte corporativo flexible con una demanda tan cambiante? Sí, la respuesta está en la tecnología. Una plataforma online que permite reservar con 24 horas de antelación un asiento en el bus corporativo. Esta reserva previa y el estudio de las tendencias de traslados, permite a BusUp diseñar las rutas más eficientes: optimizando trayectos, puntos de recogida y capacidad. Todo ello en base a la demanda y ocupaciones reales y cambiantes, pudiendo modificar rutas y paradas en función de su uso. En definitiva, transporte flexible para el trabajo flexible.
La pandemia y el confinamiento han impuesto nuevas dinámicas laborales inesperadas
Estas dinámicas necesitan de una flexibilidad imperativa. La incertidumbre generada en torno a la situación sanitaria se ven agravadas por los constantes cambios geopolíticos que afectan, no sólo a la legislación, sino también al coste de la energía, combustibles, materias primas y otras variables. Esto hace que algunos hábitos como el uso del vehículo privado, que hasta ahora era preferencia de algunos trabajadores, puedan dejar de serlo debido al alto coste de su operación (combustible, mantenimiento, seguro…), la retirada de parte del parque automovilístico debido a la legislación anticontaminación en grandes ciudades, etc. Por lo que muchos de ellos ya reclaman alternativas viables de transporte adaptadas a la compleja realidad del momento.
BusUp, gracias a su sistema de reservas previa, es capaz, con 24h de antelación, de ajustar la oferta de autocares para los usuarios a la demanda real, ayudando a las compañías a montar un transporte de empresa que tenga en cuenta los objetivos de ahorro, flexibilidad y sostenibilidad fundamentales en esta nueva realidad laboral.
En este contexto, las empresas tienen que tomar decisiones que puedan garantizar los objetivos de captación y retención de talento sin dejar de lado los objetivos económicos. Por ello, el servicio de transporte corporativo tiene que adaptarse a estas necesidades de flexibilidad, buscando la máxima eficiencia y personalización en sus rutas. Además, la esencia del negocio de BusUp consiste en la creación de rutas compartidas entre empresas. Esta dinámica permite que empresas más pequeñas, que en un principio no se podrían permitir rutas propias, puedan comprar asientos en las rutas de las empresas más grandes, lo que les permite acceder a ellas. Estas sinergias entre compañías tienen múltiples ventajas: reducen los costes, incrementan la disponibilidad y ocupación de las rutas y a la vez que mejoran la calidad del aire y reducen la huella de carbono. A continuación se muestra el ejemplo de un caso de implementación de “Sharing” entre empresas:
2 comentarios en «Vuelta a las oficinas: trabajo flexible, transporte flexible»
Sin duda, todo lo que signifique reducir el uso del coche, ¡bienvenido sea!
Y ya, si apostamos por la bici y la ciclologística… ¡maravilloso!
Ojalá más empresas optaran por estas alternativas y se convirtiera en norma. ¡Mucho éxito!
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